IMPUNIDAD EN EL
CASO COUSO
A
primeros de abril del año 2003, el reportero de televisión José Couso moría
asesinado en el hotel Palestine de Bagdag a causa de las heridas producidas por
un obús disparado por las fuerzas norteamericanas que participaban en la guerra
de Irak.
Era
del dominio público y del conocimiento de las fuerzas combatientes que en dicho
inmueble residían una buena parte de los corresponsales de los diferentes medios
de comunicación que informaban al mundo sobre la contienda. Aun así el hotel
fue atacado en una decisión insólita e irresponsable del mando americano.
Pues
bien dado que por entonces regía en España le ley de Justicia Universal en su
versión ampliada, la familia de Couso denunció los hechos y la justicia
española abrió el sumario correspondiente. Su instrucción contó con infinitas
dificultades, dada la falta de colaboración de las autoridades y de las fuerzas
armadas americanas para identificar a los responsables de los disparos que
causaron el deceso del joven periodista español.
Tras
laboriosas investigaciones que duraron ocho años en las que hubo que vencer
multitud de trabas de todo tipo, en 2011 se logró identificar a los tres
militares americanos responsables de la masacre y en consecuencia instar su
extradición y procesamiento en España.
Pero
hete aquí que el PP toma las riendas del gobierno y una de sus actuaciones
prioritarias es descafeinar la ley de Justicia Universal, para dejarla
prácticamente inoperante e inaplicable entre otros al caso Couso. De paso,
parece ser que esta fue la causa originaria para cambiar la ley, España se congraciaba con el gobierno chino al
quedar exonerados el asunto Tibet y varios casos de mafias chinas. En
consecuencia al magistrado de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz no le ha
quedado otra alternativa que dar por cerrado el sumario de Couso, máxime
existiendo una sentencia del Tribunal Supremo que exige el cierre de
actuaciones en los casos de inaplicabilidad.
A
la familia Couso la han dejado desprotegida y abandonada y el asesinato de
nuestro compatriota quedará en la más absoluta impunidad, con la ayuda de las propias
leyes españolas. Salvo que la familia emprenda otras vías de obtención de
justicia en países que mantienen la ley de Justicia Universal como Francia o en
el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo.
Y
yo me pregunto desde mi condición de lego integral en materia jurídica. ¿Por
qué unos hechos que sucedieron con la ley de Justicia Universal ampliada
vigente, no se siguen investigando con los preceptos de dicha norma y, por el
contrario, se les aplica con carácter retroactivo una norma nueva que perjudica
a los interesados? Chi lo sá.
En
resumen que la marca España cada vez funciona peor y ahora deja desprotegidos a
los españoles que tengan o hayan tenido problemas en otros países. O sea que
vamos para atrás como los cangrejos. Eso sí nos aseguramos transacciones
comerciales con esos estados a los que beneficia la norma que es a lo que
estamos. Y pelillos a la mar.
Es
decir que los populares además de meternos en la guerra de Irak, en la que no
se nos había perdido nada y por lo que hemos pagado un alto precio, promulgan
leyes que dejan en la mayor impunidad a los asesinos de españoles durante el
transcurso de la misma. ¿Ustedes entienden algo?
La
justificación que dieron para la entrada en aquella desdichada contienda fue la
posesión por parte de Irak de armas de destrucción masiva que nunca se
encontraron. Por eso la Demencia, con su sabiduría proverbial, cantaba a grito
pelado en las canchas de baloncesto animando al Estudiantes de sus amores:
“Anda andarán las armas de Sadam”.
Y
yo digo: Anda andarán la vergüenza, la decencia y la honestidad de muchos
políticos españoles que aprueban estas leyes que perjudican a sus compatriotas.
¡Qué país Miquelarena¡
Lo
siento por la familia de Couso. La memoria de este joven se merecía algo mejor
que la impunidad de su asesinato facilitada por las leyes españolas. ¡Qué asco
de gobernantes¡
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