jueves, 27 de abril de 2023

 

DOÑANA: MEDIO AMBIENTE Y REGADÍOS

El Parque Nacional de Doñana es un ecosistema de alto valor ambiental que está pasando por malos momentos. Para preservar esos valores ambientales ha sido también declarado Reserva de la Biosfera en 1980 y Patrimonio de la Humanidad en 1994.

La causa principal del estado en que se encuentra Doñana es la falta de lluvias. Cuando no llueve lo suficiente, el acuífero no se recarga, los niveles piezométricos descienden y el sistema de lagunas superficiales interconectado con el acuífero: los llamados lucios, se seca.

Prueba de que la sequía es la causa principal de la situación del Parque, la encontramos en que también los embalses que retienen aguas superficiales en la cuenca del Guadalquivir están bajo mínimos. Y esto traerá graves consecuencias para los usos del agua y especialmente para los regadíos que se verán abocados a no regar o experimentarán sensibles reducciones en las superficies regadas. Es posible también que haya problemas locales en el abastecimiento urbano.

En el año 2014 se llevó a cabo un plan de reestructuración del regadío en la corona de Doñana, dejando pendiente una superficie en la parte norte, en el condado de Huelva, de la realización de un trasvase de 20 Hm3 de aguas superficiales desde el sistema TOP (Tinto – Odiel – Piedras) para descargar el acuífero y reducir su sobreexplotación. De estas obras competencia del gobierno central no se ha ejecutado ninguna. Y ya han pasado 9 años.

Expertos andaluces que conozco, consideran que Doñana mejoraría su situación si estas obras de abastecimiento de agua superficial se llevan a efecto, propugnando al tiempo que los regadíos sean sostenibles. Lo cual es lógico y acertado.

Por otra parte. Las obras de ejecución de la presa de Alcolea (246 Hm3) sobre el río Odiel que es fundamental para asegurar agua a todo el sistema hidráulico de Huelva, se encuentran paradas desde 2017, habiéndose ejecutado aproximadamente el 20 % y no existiendo fecha previsible para su reanudación. Tampoco se han llevado a cabo otras obras de interconexión del sistema Andévalo – Chanza – Piedras - Alcolea y de conducción y distribución de agua que reducirían la presión sobre el acuífero de Doñana.

El ecologista ministerio de Transición Ecológica, poco amigo de presas, hasta propone la barbaridad de eliminar algunas como la de Valdecaballeros, y menos de los regadíos, no ha movido un dedo para resolver el problema de unos cientos o miles de familias, que tienen su “modus vivendi” en el regadío, pendiente de que se les suministre agua superficial. Parece que optan porque estás familias abandonen su actividad, tengan que emigrar y se despueble la zona como ya ocurre en otras partes de España.

Y no han perseguido los riegos ilegales, que esos sí que hacen daño al acuífero y a los regantes legales del sistema Almonte – Marismas, que sólo riega la cuarta parte de lo que se previó inicialmente para no afectar al acuífero de Doñana. Aunque este tema de los pozos ilegales no es exclusivo de Doñana. En la Mancha, las Tablas de Daimiel están prácticamente secas. La administración hidráulica lleva mucho tiempo mirando para otro lado en esta cuestión. Y sé de lo que hablo.

La controversia sobre Doñana se ha llevado a Bruselas en donde el comisario de Medio Ambiente, un lituano al parecer de Los Verdes, en principio se pone en contra de la administración andaluza, aunque dice que estudiará sus planteamientos. Pero el lobby ecologista pesa mucho en Bruselas y Moreno Bonilla, que trata de defender los intereses de los regantes del condado de Huelva, lo va a tener difícil. El Ministerio de Transición Ecológica no apoya, ni hace nada de lo prometido: la ejecución de las obras de abastecimiento de agua superficial desde el sistema TOP que son de su competencia y que resolverían el problema de los riegos y salvarían Doñana. Ni tampoco propone soluciones alternativas que resuelvan el problema.

Y es que el lobby ecologista español, sucursal del de Bruselas, se ha empeñado en que desaparezcan 1 millón de hectáreas de regadío en España. De un plumazo. Unas lumbreras.

Pero el problema de base es la ausencia de lluvias. La falta de precipitación es la clave de esta cuestión. Si no llueve sufrirán los abastecimientos urbanos, los regadíos, los usos industriales y recreativos y también sufrirá Doñana que seguirá en un estado lamentable por la falta de lluvias.

Así que, como el hombre, de momento, no tiene control sobre las precipitaciones que regula la naturaleza, no nos queda más remedio que esperar que llueva y los que seamos creyentes hemos de acudir a la procesión, a ver si desde arriba nos echan una mano.

Y entretanto hemos de utilizar el agua de abastecimiento de un modo racional evitando despilfarros y fugas en las redes, seguir con la modernización y digitalización de los regadíos para usar el agua del modo más eficiente, y planificar y gestionar el agua de la que dispongamos de modo adecuado. Un nuevo Plan Hidrológico Nacional se revela como imprescindible.

Todo menos mantener luchas políticas electoralistas que no conducirán a nada bueno.

Aunque de estos políticos tan mediocres que padecemos, me temo lo peor.

jueves, 20 de abril de 2023

 

AGUA, TESTOSTERONA E IDEOLOGÍA MINISTERIAL

La controvertida ministra de Transición Ecológica, ha efectuado unas extensas declaraciones al periódico La Verdad, en las que ha tratado sobre el agua. Se ha referido a los caudales ecológicos en el río Tajo fijados en el plan hidrológico de la demarcación (2022 – 2027) recientemente aprobado. También ha tratado del futuro del trasvase Tajo – Segura, de la situación existente en el Mar Menor y de los problemas en la bahía de Portman.

Voy a centrar este artículo en comentar sus manifestaciones sobre los caudales ecológicos en general, y sobre los fijados en el eje del Tajo en particular, que pueden condicionar el futuro del trasvase Tajo – Segura.

La señora ministra afirma en la entrevista, que en los temas del agua hay algo de testosterona y poca lucidez. No parece apreciar que en los actos que lleva a cabo su ministerio, se observe una gran carga de ideología ecologista. Y tampoco considera que hay cierta falta de prudencia en la toma de algunas de las decisiones que adopta su departamento, que se lleva a cabo sin estudios contrastados que valoren adecuadamente las consecuencias técnicas, jurídicas, económicas y sociales de las mismas.

Los caudales ecológicos fijados en el nuevo plan para el eje del Tajo son el paradigma de lo que no debe hacerse, hasta que no se disponga de estudios homologados que sirvan para determinar lo más exactamente posible los valores de esos caudales, a los cuáles en la normativa española se les otorga, de modo sorprendente, la condición prioritaria de ser una restricción previa a los sistemas de explotación.

Un ejemplo del incremento desmesurado de los caudales ecológicos acordados en el nuevo plan hidrológico, se da en el curso principal del río Tajo. En el plan hidrológico anterior (2016 – 2021) se fijaron unos caudales mínimos de 6 m3/s (189,2 Hm3/año) en Aranjuez y 10 m3/s (315,3 Hm3/año) en Toledo y Talavera de la Reina.

En el nuevo plan hidrológico (2022 – 2027), estos caudales ecológicos experimentan alzas desmesuradas. Se establece un período transitorio (siempre con valores de los caudales ecológicos nuevos superiores a los antiguos) y desde el 1 de enero de 2027, se fijan los definitivos que suponen fuertes aumentos sobre la situación actual.

Los valores nuevos a aplicar desde 2027 son 273 Hm3/año en Aranjuez, 544,1 Hm3/año en Toledo y 583,7 Hm3 / año en Talavera de la Reina.

Esto como resultado final de un rifirrafe entre técnicos del ministerio y de la Confederación en el que los primeros hicieron una modificación a la baja de los caudales ecológicos que había fijado el organismo de cuenca. La ministra asegura no haberse enterado de este lío. Pues debería estar más atenta.

Después de todo esto la señora ministra no tiene empacho en asegurar que los nuevos caudales ecológicos se han fijado de una manera creativa e innovadora. Ya me contarán.

La realidad es que este incremento de caudales ecológicos en el eje del Tajo puede poner en riesgo el mantenimiento de los volúmenes de agua que actualmente se envían al Segura. Este trasvase lleva 44 años funcionando y ha generado una agricultura e industria agroalimentaria en Levante muy importante, que debiera tratar de mantenerse, si se buscan soluciones beneficiosas para la cuenca del Tajo y para el Levante español.

Pasa olímpicamente la señora ministra en sus declaraciones, del estudio llevado a cabo en la cátedra de Hidráulica de la Escuela de Ingenieros de Caminos de Madrid por el catedrático Luis Garrote, que asegura que en el tramo de Aranjuez los caudales ecológicos mínimos de 6 m3/s fijados en el Plan Hidrológico anterior son suficientes para mantener el buen estado de las masas de agua. También advierte el profesor de las diferencias sustanciales que se dan entre los resultados de la aplicación de métodos hidrológicos o hidrobiológicos para su determinación. Esto explica que todavía no exista un método de cálculo de los caudales ecológicos que esté homologado y contrastado, y que aporte seguridad en sus resultados.

En la XX Jornada Técnica de FENACORE (Federación Nacional de Comunidades de Regantes), Luis Garrote, presentó una comunicación de gran interés en la que se daba cuenta de la repercusión de mantener los caudales ecológicos, sobre la disponibilidad de agua para otros usos.

Veamos los casos de las cuencas del Tajo y Guadiana que son las que más afectan a Extremadura, desde donde escribo.

CUENCA

DISPONIBLE

NATURAL %

DISPONIBLE

REGULADO %

DISPONIBLE

PERC. 5 % (%)

DISPONIBLE

PERC. 10 % (%)

DISPONIBLE

PERC. 15 % (%)

GUADIANA

1

46

43

41

40

TAJO

6

66

50

41

38

 

Como se deduce de la tabla anterior, mantener caudales ecológicos disminuye la disponibilidad para otros usos, siendo más acusada la disminución en la cuenca del Tajo que en la del Guadiana, y mayor cuanto más lo sea el percentil utilizado para determinar los caudales ecológicos mínimos mediante métodos hidrológicos.

La ministra debió dar cuenta en la entrevista de si conoce la causa por la que, en la cuenca del Guadiana, al comienzo del año hidrológico 22 - 23 (1 de octubre de 2022) el embalse de Alqueva próximo a la frontera española se encontraba al 70 %, mientras los embalses de la zona occidental del Guadiana (Extremadura) sólo tenían el 30 %. Tal vez los caudales ecológicos y el convenio de Albufeira, que debiera ser revisado, pudieran tener la explicación de esta notable diferencia.

También debió explicar si la disminución de agua embalsada en general en España, se debe solamente a la sequía o también a la aplicación durante un período de la misma de los caudales ecológicos sin reducción alguna.

Y por último explicar las razones por las que se va a demoler la presa de Valdecaballeros, con las perspectivas que trae el cambio climático según los expertos.

Así que yo creo que hay poca testosterona todavía por parte de los afectados, los cuales están aguantando carros y carretas y por el contrario hay mucha ideología ecologista en las actuaciones del Ministerio de Transición Ecológica.

Y sobre todo hay poca agua. A ver, si llueve.

viernes, 14 de abril de 2023

 

INQUIETUD EN EL REGADÍO ESPAÑOL

Hace unos días he tenido la oportunidad de asistir a las XXI Jornadas Técnicas organizadas por FENACORE (Federación Nacional de Comunidades de Regantes) en Madrid.

He sacado una conclusión final, tras escuchar las diferentes intervenciones de los ponentes y las conversaciones mantenidas en los pasillos durante los descansos: el regadío español está inquieto y preocupado. No ve un futuro seguro. Y esto es muy grave para la estabilidad de un sector que es estratégico para España. Aunque  algunos políticos que dirigen los destinos de la nación, parecen ignorantes de la ineludible necesidad del regadío para nuestro país.

La importancia del regadío nace de la notable superficie de riego que existe en España, más de 3,8 Millones de ha, que ocupando un 15 % de la Superficie Agraria Útil, produce más del 60 % de la Producción Final de la Rama Agrícola. Gracias al regadío se generan rentas y empleo en el medio rural y se fija la población en el territorio impidiendo su vaciamiento demográfico. Las zonas rurales que mantienen o aumentan población, se encuentra en las áreas de España en las que hay regadíos.

Debido a las producciones agrarias del regadío mantenemos la soberanía alimentaria de España, ya que suministra en fresco o a través de los productos transformados en la industria agroalimentaria de la que es principal abastecedor, la mayor parte de los alimentos que necesitamos los españoles y los turistas que nos visitan. Y además se ha constituido en un importante sector exportador, que hace que nuestra balanza comercial sea positiva.

Expertos de la talla de Jaime Lamo de Espinosa aseguran que la agricultura española será de regadío o no será. A nivel mundial la FAO encomienda al regadío la tarea de eliminar el hambre en el mundo. Hoy, más de 800 millones de habitantes de la Tierra no disponen de alimentos suficientes.

¿Y a qué se debe la inquietud y preocupación existentes entre los regantes españoles? Pues a diversas causas que analizaremos, aunque sea a vuelapluma.

La primera es la desmesurada subida de los costes de los insumos agrarios necesarios para obtener las producciones en las explotaciones. Especialmente el de la electricidad, que inició un calvario para los regantes, con la desaparición en julio del año 2008 de las tarifas especiales de riego R0 y R1, lo que dio lugar a una subida alarmante del coste energético en contra de lo prometido. Todavía no se ha conseguido reducir este coste, por la vía de poder contratar dos potencias al año (período de riego y no riego) y de reducir el IVA.

Todo el proceso de modernización del regadío llevado a cabo para mejorar la eficiencia del riego – ya somos junto a Israel, el país que utiliza el agua de modo más eficiente - en la mayor parte de los casos conlleva un incremento del uso de la energía. La subida de los costes energéticos se ha sumado al de las inversiones que hay que asumir en la modernización del riego.

Pero también se han incrementado sensiblemente el precio de otros insumos: combustibles, fertilizantes, semillas y plantones, fitosanitarios y laborales, que están poniendo en un brete a la capacidad de pago de las explotaciones de riego.

Las presiones ambientalistas dimanantes de la normativa europea y, especialmente en relación con el riego, de las disposiciones de la Directiva Marco del Agua (DMA), en la que se basa la redacción de los planes hidrológicos, cuyo tercer período de planificación (2022 – 2027) ha sido recientemente aprobado, es un motivo de grave preocupación del sector del riego, ya que estos nuevos planes no aseguran con la garantía suficiente la disponibilidad de agua para nuestros regadíos.

El incremento notable de los caudales ecológicos - un concepto acuñado en España pues la DMA no dice nada sobre ellos - determinados sin estudios previos serios que valoren el método de cálculo, ni sus consecuencias jurídicas, económicas y sociales, dado su carácter de restricción previa a los sistemas de explotación, hace que la garantía del riego se vea disminuida. Se estima en un 16 % la parte de la regulación que se llevan los caudales ecológicos y que ha de restarse de las disponibilidades para otros usos, entre ellos el regadío.

Por cierto, como la mayor parte de los ríos españoles presenta en régimen natural en la época de estiaje unos caudales prácticamente nulos, los caudales ecológicos hay que suministrarlos desde los embalses de regulación que se construyeron para abastecimiento o regadío en su mayor parte.

Y en lugar de incrementar la capacidad de regulación, mediante la construcción de nuevos embalses, que además son necesarios dadas las previsiones de los expertos en cambio climático que aseguran que habrá más períodos de sequias, nos encontramos en uno de esos períodos secos lo que preocupa seriamente a los regantes de algunas cuencas, y más frecuencia de episodios de lluvias torrenciales, la política del Ministerio de Transición Ecológica, que cede alegremente a las presiones de lobbies ecologistas radicales, es la de no sólo no construir ninguno, sino desmantelar alguno de ellos. Como se ve una barbaridad que pagaremos muy cara si alguien no detiene este disparate.

Los representantes del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación que asistieron al evento, mostraron su apoyo al regadío, al que consideran la joya de la corona de la agricultura, pero no tienen las competencias sobre el agua y en este sentido por muy buena voluntad que ponen, están sometidos a la política ambiental y conservacionista a ultranza que se sigue desde el Ministerio de Transición Ecológica. La cual es contraria a los regadíos.

El regadío español espera una reacción de la administración y la toma de decisiones gubernamentales, que hagan que en el más breve plazo desaparezca la inquietud que padece el sector, de modo que los regantes puedan dedicarse a su oficio de siempre: producir alimentos para los españoles a precios asequibles en un regadío sostenible.

 

martes, 4 de abril de 2023

 

MALOS DATOS ECONÓMICOS

Por mucho que el gobierno de España y los medios de comunicación afines, pretendan vender a los españoles con machacona insistencia, lo bien que pinta la economía española, los datos reales son implacables y dan idea de la situación real de España en el contexto económico europeo. Una vez más la España real es muy diferente de la España oficial. El país de las maravillas que nos venden es una falacia y no se sostiene si se analizan datos oficiales que no estén cocinados.

La última publicación de Eurostat, en la que se analiza la evolución del PIB per cápita en la UE a 27, desde el año 2019 de la pandemia, al ejercicio 2022, nos devuelve a la cruda realidad y es la de que España es la nación que más se ha empobrecido de todas las que componen la Unión Europea.

Entre 2019 y 2022 el PIB per cápita se ha incrementado una media del 5 % en el conjunto de países. En España ha disminuido un 2,3 % y somos los últimos de la fila. Estamos a 7,3 puntos de la media UE. La primera de la clase es Irlanda en donde el PIB per cápita ha aumentado un 30,1 %, seguida de Croacia en donde el incremento ha sido del 14,4 %.

En valores absolutos, tanto en el año 2019 como en 2022 el país primero del ranking es Luxemburgo, con valores de 83.590 y 83.940 € respectivamente y el último Bulgaria con 6.630 y 7.250 €. España ocupa estos años el puesto 13 de 27, que no se corresponde con su potencial económico. Los valores en el caso de España eran: en 2019, 25.180 € y en 2022 el valor del PIB per cápita español se había reducido a 24.590 €.

En 2019 la diferencia entre el PIB de España y la media europea era de 2.534 € menos, y en el año 2022 esta brecha se había incrementado hasta alcanzar los 4.563 € menos. En porcentaje, en 2019 el PIB per cápita español era el 90,86 % del medio europeo, y en el año 2022 habíamos descendido al 84,34 %.

Portugal, nuestra nación vecina, ha incrementado el PIB per cápita un 3,4 % en el período analizado y se va acercando paulatinamente al nuestro. En 2019 le sacábamos 6.510 € de diferencia. En el año 2022 esta diferencia se había reducido a 5.290 €.

Como se infiere de todos los datos expuestos la situación de España deja mucho que desear respecto del contexto europeo y la albórbola y alegría del gobierno respecto a nuestra situación económica no tiene ninguna base en qué fundarse.

Veamos ahora los datos relativos a la renta disponible de los hogares.

La renta disponible de los hogares, se define como la diferencia entre el ingreso familiar y los pagos por impuestos y cargos a la Seguridad Social. Esta renta disponible puede destinarse al consumo y/o al ahorro. Y marca el nivel de poder adquisitivo de una familia.

Recientemente la OCDE ha publicado los datos de evolución de la renta disponible en los diversos países integrados en ella. España es el país europeo en el que la renta disponible ha experimentado una evolución peor.

Durante el año 2022, España ha perdido un 8 % de su renta disponible, siendo el país de nuestro entorno con peores datos. El país europeo más cercano a nosotros en esta evolución negativa es Irlanda (-5,1 %) y por detrás están, Eslovenia (-3,5%), Portugal (-3,4 %), Finlandia (-3,3 %), Reino Unido (- 3 %), Bélgica (-2,4 %) e Italia (-1.3). Otros países de nuestro entorno cercano han experimentado aumentos en la renta disponible: Alemania (+0,2), Austria (+1,7 %), Noruega (+3,4 %) y en lugar destacado Polonia (+7,8 %). La media de los países de OCDE ha perdido -1,8 % de la renta disponible.

Si se analiza la evolución de la renta disponible en países europeos entre el tercer trimestre de 2019 y el tercer trimestre de 2022, comprobamos que España (- 7,4 %) es el país que más renta disponible ha perdido en Europa. Nos siguen Reino Unido (- 3,9 %) y Portugal (-3,8 %). En positivo destacan Grecia (+ 9%), Polonia (+7,6 %) y Noruega (+6,5 %) aunque también Eslovaquia, la República Checa, Eslovenia, Francia e Italia han aumentado su renta disponible.

Si se reduce la renta disponible y la inflación se encuentra en límites muy altos, la inflación subyacente (aquella que no computa la energía, ni los alimentos en fresco) está en el 7,5 % y la de la alimentación en el 15,4 %, cada vez es mayor el número de familias españolas que se las ve y se las desea para llegar a fin de mes y, en consecuencia, el número de personas en riesgo de pobreza aumenta en España día tras día.

Una encuesta reciente de un organismo tan poco sospechoso de ser enemigo del gobierno como es el CIS de Tezanos, refleja que de los 18,7 millones de hogares que existen en España, el 17,8 % de ellos muestra dificultades para llegar a fin de mes. El 5,2 % ha tenido que endeudarse y el resto ha tenido que tirar de los ahorros para hacer frente a la situación.

En resumen, los españoles somos más pobres ya que tenemos menos renta disponible para gastar y además hemos perdido poder adquisitivo por la vía de la inflación. Por consiguiente, el ahorro va disminuyendo y en muchos casos los españoles han tenido que endeudarse para poder capear el temporal que se ha presentado.

Si a todo esto unimos que somos el país de la UE con mayor tasa de desempleo, casi el doble que la media europea, que se elevaría todavía más si se computaran los fijos discontinuos que no figuran como parados y cuyo número se estima entre 450.000 y 500.000, lo que haría que superáramos de largo los 3 millones de desempleados, la situación no es ni mucho menos, lo optimista que el gobierno nos quiere hacer ver.