viernes, 25 de noviembre de 2016

ANDALUCES POBRES VERGONZANTES

Lo que nos faltaba. También desde Madrid arremeten contra Andalucía. Bueno contra esta bella comunidad autónoma y por extensión contra todas las otras - entre ellas Extremadura mi tierra - que reciben fondos compensatorios.

Estos ataques se producen debido a que, salvo honrosas excepciones que haberlas haylas, nuestros políticos se caracterizan por atesorar en sus exiguas mentes un profundo analfabetismo histórico de lo que ha sido y es España, lo cual resulta preocupante.

No teníamos bastante con el “España nos roba” de Cataluña cantinela que se ha demostrado con números y hasta la saciedad que es una inmensa falacia. Ahora se nos descuelga la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes con el mantra de que su Comunidad Autónoma otorga anualmente 3.000 Millones de € a Andalucía para financiar su sanidad, su educación y su dependencia.

A esta señora que hasta ahora daba la impresión de ser persona prudente y modosita parece que se le ha ido la pinza. En lugar de rectificar sus bochornosas, mendaces y lesivas manifestaciones ha querido quitar hierro al asunto, aludiendo al contexto (como hacen casi todos) tomándonos por tontos a los que hemos podido escuchar repetidas veces sus argumentos.

Alexander Pope un poeta inglés acuñó la frase “errar es humano, perdonar es divino y rectificar es de sabios” La mandataria madrileña ha hecho caso omiso a la sentencia del vate inglés y sigue en sus trece. Con el fin de suavizar su metedura de pata se ha limitado a asegurar, con una risita nerviosa, que ella quiere mucho a los andaluces. Y a las andaluzas, claro, faltaría más.

Alguno de nuestros políticos autonómicos como se sienten dueños y señores feudales de sus territorios, en cuanto tienen oportunidad ponen sobre la mesa las balanzas fiscales territoriales. Olvidan que la fiscalidad es un aspecto personal de cada contribuyente. Y no tiene nada que ver con los territorios.

Cifuentes debería saber que un andaluz contribuye por igual a las arcas públicas que un madrileño. Su IRPF es idéntico a igualdad de ingresos y de circunstancias personales. Y se paga el mismo IVA en unos territorios que en otros. Los impuestos que gravan los hidrocarburos, el tabaco o las bebidas alcohólicas son iguales en todas las regiones de España.

Madrid recauda más que Andalucía entre otras razones porque debido a su condición de capital de la nación allí tienen su sede la mayor parte de los organismos públicos del Estado que costeamos todos los españoles. A lo que se añade un elevado número de entidades financieras o de empresas que operan en el resto de España en donde obtienen buena parte de sus beneficios, pero que contribuyen en Madrid.

En otro orden de cosas la población madrileña está compuesta en buena parte por emigrantes procedentes de Andalucía, Extremadura, Castilla La Mancha y otras regiones que vieron y ven vaciadas sus poblaciones al verse sus habitantes obligados a emigrar ante la falta de horizontes laborales adecuados en las mismas. Esta población que debería haber contribuido fiscalmente en sus lugares de origen, si no se hubiera visto compelida a emigrar, lo hace ahora en Madrid, en Cataluña o en el País Vasco. Es decir en las regiones favorecidas por el poder central desde tiempos inmemoriales y en donde se invirtieron con preferencia los ahorros del resto de España.

Yo creo que a la señora Cifuentes le conviene leer algo más sobre lo que es la historia española y cómo el poder central ha sido tacaño con esas regiones que aportaron mano de obra barata y capitales para que otro conjunto de regiones privilegiadas tuvieran un desarrollo más intenso que aquellas.

Las consecuencias son que ahora en estas áreas desarrolladas se recauda más en valor absoluto que en las otras. Y al ser la fiscalidad un asunto individual y con objeto de tratar de nivelar servicios, el Estado tiene que compensar a esas regiones menos favorecidas. Y eso no es solidaridad ni nada que se le parezca. Eso es un acto de estricta justicia distributiva. La solidaridad ya la tuvieron esas comunidades autónomas ahora más atrasadas cuando prestaron su población y sus dineros ahorrados para favorecer el desarrollo de las regiones ahora potentes en detrimento del suyo propio.

Así que señora Cifuentes debería usted saber que los andaluces y por extensión los habitantes de otras regiones menos favorecidas, no son pobres vergonzantes, ni unos menesterosos que viven de la caridad de los madrileños. Son contribuyentes que tienen los mismos derechos a disfrutar de iguales servicios que el resto del país, porque  pechan con sus impuestos exactamente igual que los madrileños.

Otro día le demostraré que los habitantes de Madrid disfrutan de mejores servicios que el resto. Si quiere comprobarlo véngase un día en tren a Plasencia, Cáceres, Mérida o Badajoz y luego me lo cuenta.

Y ponga inmediatamente en práctica la máxima de Pope: rectificar es de sabios. Y de buenos políticos. Por nuestra parte si enmienda la plana la perdonaremos. Como sentenció Pope: perdonar es divino. Amén.




viernes, 18 de noviembre de 2016

¡ALBRICIAS¡ VAMOS A VIVIR MIL AÑOS

Estoy que no vivo. Lo mismo llegamos a durar mil años. Desde que me he enterado de esta singular noticia estoy en continua albórbola (gritos de alegría).

La posibilidad de alcanzar una edad tan provecta está certificada por un tal Aubrey de Grey ingeniero inglés. Es experto en gerontología y dirige la Fundación para la Investigación de la Senescencia Negligible Ingenierizada (SENS). Asegura impertérrito que se puede llegar a vivir mil años o más.

Eso sí parece que esa bicoca es más factible para aquellos que anden rondando la cincuentena o sean aun más jóvenes. A mí me ha cogido con veinte años más por lo que haciendo cuentas confío en llegar a los 980 años como Matusalén.

En la costumbrista y conocida zarzuela La Verbena de la Paloma, se cantaba en el famoso diálogo entre Don Sebastián y Don Hilarión un fragmento que rezaba: “hoy las ciencias adelantan que es una barbaridad” Y todo porque se había conseguido poder utilizar el aceite de ricino como purgante.

Lo que está ocurriendo ahora con las ciencias no es un avance ni un adelanto, es el acabose, el frenesí, el despiporre, vamos el desiderátum.

El tratamiento para alcanzar la vida milenaria ya se está aplicando en Madrid. La primera consulta para valorar el estado del paciente tiene un coste que ronda los 1.000 €. Mal empezamos.

Parece que el quid de la cuestión se encuentra en adelantarse a las posibles enfermedades, controlar periódicamente el estado del sujeto, hacer ejercicio moderado y, al parecer, tomarse 18 pastillas al día por el módico precio de 300 € mensuales.

El problema va a residir en que como vivamos mil años habrá que ver cómo nos colocamos y nos distribuimos en el planeta Tierra. Si la media actual de vida es de 80 años, cuando vivamos mil es posible que moren en la Tierra unos 87.500 Millones de habitantes. ¡No vamos a poder ni respirar¡

Claro que la situación no será tan grave dado que habrá capas importantes de la población que no podrán acceder al invento. Si los parados españoles que cobran 426 € al mes de prestación, el que los cobre claro, han de destinar 300 € al tratamiento no les quedará para comer y se morirán de hambre. Con lo cual el descubrimiento no va dirigido a ellos. Palmarán como hasta ahora.

Los del salario mínimo interprofesional ídem de lienzo. Si a los 650 € les restas los 300 € tuyos y otros tantos del cónyuge y de los hijos, aquí no hay nada que hacer. Morirán todos a su edad y no alcanzarán el objetivo del milenio.

De los jubilados con pensiones medias de 800 o 900 € ni hablamos. Teniendo que echar una mano a los hijos tampoco podrán acceder al momio. Aunque a estos pensionistas ya les da igual pues muchos de ellos con lo que están pasando deben estar esperando el deceso con los brazos abiertos. Pues será siempre un mal menor. Una liberación. A mayor abundamiento estos veteranos con la cantidad de pastillas que ya ingieren, 18 nuevas sería demasiado. No podrían con ellas ni con sus efectos secundarios.

Podían hacerse algunas consideraciones adicionales pero las entradas de este blog tienen un límite que es el cansancio del lector.

Como siempre el tratamiento milagroso quedará circunscrito a las capas de la sociedad más pudientes. Que alcanzarán la longevidad deseada y la felicidad eterna. Bueno casi eterna. Pues no han de olvidar como decía el tango que “Mil años no es nada”. El tango aseguraba que veinte años, pero hay que actualizarse.

Aunque todo tiene sus pros y sus contras. Paralelamente a este invento “antiaging”  - se lo traduzco para que no tengan que consultarlo en un diccionario, significa anti envejecimiento - los ingenieros y los científicos en general han de descubrir el modo de anular los accidentes de avión, los de los coches de lujo, los de los trenes de altísima velocidad y los de los yates de amplia eslora.

Lo digo porque dado que estos son los medios de locomoción generalmente utilizados por los poderosos (únicos que podrán permitirse los tratamientos) como no desaparezcan a la par los accidentes - que de no conseguirse seguirán causando víctimas mortales - los tratamientos servirán de poco.

Claro que si pillas los quinientos años, la inversión seguiría siendo rentable.

Y así, con noticias como esta vamos pasando la vida. Al fijarnos atentamente en ellas nos olvidamos de cosas tan baladíes como: el paro, el empleo precario, las pensiones, la corrupción política y de la otra, la desigualdad, los desahucios, las muertes por pobreza energética, las listas de espera de la sanidad, la deuda galopante, el déficit imparable y todas esas bagatelas que nos rodean. ¡Ah¡ y los habitantes de la costa de la bellota del “maravilloso” ferrocarril del que disfrutamos en Extremadura.

viernes, 11 de noviembre de 2016

REGADÍOS: SUMIDEROS DE CO2

Según han hecho público hace unos días los meteorólogos de la NOAA (National Oceanic and Atmospheric Administration) de los Estados Unidos, la concentración de CO2 (Anhídrido carbónico o Dióxido de carbono) en la atmósfera ya ha alcanzado el valor record de 400 ppm (partes por millón = mg/l = g/m3).

Esta cifra nos indica que su contenido atmosférico continúa elevándose día tras día y, en consecuencia, se agudizan los efectos del cambio climático siendo sus manifestaciones más destacadas: un acusado incremento de la temperatura y la disminución del régimen de precipitaciones en la zona mediterránea que es la que afecta a España. También se detecta un aumento en la frecuencia de fenómenos extremos: inundaciones y sequías.

Y todo ello a pesar de los Acuerdos sobre el Cambio Climático suscritos por la mayoría de los países, el último de ellos en París el cual ha entrado en vigor hace unos días. Claro que una cosa es firmar y otra muy distinta cumplir. Y precisamente los países más incumplidores son los que más contaminan. Lo de siempre, vamos.

Hay que advertir que la existencia de CO2 en la atmósfera es imprescindible para que coadyuvando a generar un moderado efecto invernadero pueda mantenerse la temperatura de la tierra en unos 15 - 17ºC. En ausencia o reducida concentración de CO2 atmosférico la temperatura de nuestro planeta descendería hasta unos -18ºC haciendo la vida terrestre prácticamente imposible.

Al hilo de la situación límite en la que estamos a causa del inusitado incremento de la concentración de CO2 que se ha alcanzado, voy a explicar, en lo que sigue, los beneficios que los regadíos pueden aportar a la sociedad en relación con la problemática derivada del cambio climático, debido a su capacidad para actuar como sumideros de CO2.

Esta peculiaridad hará todavía más importantes las funciones que han de cumplir las alrededor de 324 Millones de ha de tierras equipadas para el riego que hay en el mundo (FAO, 2012). Su primordial misión será colaborar decisivamente para conseguir el abastecimiento agroalimentario de la población mundial que alcanzará dentro de unos pocos años los 9.000 millones de habitantes. Las otras son: generar millones de puestos de trabajo en todo el mundo y fijar la población en las áreas rurales evitando la desertización poblacional de grandes extensiones de nuestro planeta.

La capacidad de almacenamiento de CO2 por los regadíos tiene lugar por el balance de este elemento que se produce entre la fotosíntesis o función clorofílica, actuación formadora de los tejidos de las plantas cultivadas en ellos y la respiración de dichos cultivos.

El proceso en lenguaje comprensible se desarrolla del siguiente modo:

Mediante la función clorofílica o fotosíntesis las plantas forman sus tejidos en base a la siguiente reacción:

CO2 (atmosférico) + Agua + Luz = Carbohidratos + Oxígeno (pasa a la atmósfera)

El proceso de respiración o destrucción funciona al revés:

Carbohidratos + Oxígeno (atmosférico) = CO2 (pasa a la atmósfera) + Agua + Energía

El balance Fotosíntesis - Respiración se convierte en biomasa y el CO2 fijado representa del orden del 45 – 50 % del peso de la planta.

En consecuencia, los cultivos que ocupan los regadíos absorben CO2  de la atmósfera y por tanto colaboran a la reducción de su concentración en ella contribuyendo a la mitigación de los efectos del cambio climático.

Existen experiencias en diversas partes del mundo que demuestran el balance favorable de los cultivos a la fijación del CO2 atmosférico.

En España también se han llevado a cabo este tipo de estudios. A continuación se refleja un resumen adaptado de los resultados referidos a los principales cultivos, del realizado en Murcia por Micaela Carvajal investigadora del CSIC.


CULTIVO


Kg. de CO2 fijado /ha
TOMATE
31.800
PIMIENTO
22.638
SANDÍA
5.956
MELÓN
8.020
LECHUGA
8.437
BRÓCULI – NAXOS
8.354,5
ALCACHOFA
5.978
TRIGO
13.750
CEBADA
13.000
CIRUELO
23.242,9
MELOCOTONERO
28.369,5
NECTARINA
26.587,1


Con esta cifras las aproximadamente 20.000 ha de tomate para transformación que se cultivan en los regadíos de Extremadura llegarían a fijar una cantidad de CO2 que se elevaría a 636.000 t.

Si estimamos en base a la distribución de cultivos existentes en dichos regadíos una media de 20.000 kg/ha de CO2 fijado,  la cantidad que absorberían de la atmósfera las 259.000 ha de riego que existen en Extremadura supondría la cifra de 5,18 Millones de toneladas o lo que es lo mismo 5,18 Mt (Mega toneladas) de CO2.  

En consecuencia los regadíos han de ser considerados como sistemas que, además de cumplir las importantes funciones antes descritas, favorecen muy activamente la lucha contra el cambio climático al actuar como sumideros de CO2 que es el gas más importante que causa el efecto invernadero.


viernes, 4 de noviembre de 2016

MODALES RUFIANESCOS

Versalles es un palacio situado en las inmediaciones de París. Iniciada su construcción por Luis XIII de Francia como palacete de caza, fue ampliado por Luis XIV, el rey Sol, para residencia real. Por sus fastuosos salones pululaba la corte francesa haciendo gala de unos modales muy refinados. Parece que predominaba en las relaciones personales una exquisita educación y cortesía. De modo que la palabra versallesco para calificar a determinado tipo de comportamientos, ha sido definida por el diccionario de la RAE en lo que se refiere al lenguaje y a los modales como “afectadamente corteses”.

En un ámbito como el del Congreso de los Diputados de España parecería exagerado reclamar de los parlamentarios unos modales y un lenguaje versallescos. Pero sí es exigible que mantengan unas actitudes que comporten un respeto mínimo entre ellos. Ese modo de actuar sería también una deferencia para con los ciudadanos de los que aquellos son representantes elegidos por procedimientos democráticos.

Pues bien en el parlamento español se están imponiendo los modales rufianescos. Los califico así porque el discurso pronunciado por el diputado de ERC Gabriel Rufián en la investidura de Rajoy, fue un compendio de falta de respeto, de inquina y de odio contra un partido como el PSOE que ha ejercitado un derecho democrático y legítimo, como es el de abstenerse dejando que gobierne la lista más votada, para evitar un bloqueo institucional y unas terceras elecciones que hubieran sido el hazmerreir de Europa.

A Rufián, un radical procedente de la “banlieu” barcelonesa, no le han enseñado modales, ni respeto al adversario político ni nada que se le parezca. Este joven es el fruto de una educación fundamentada en el odio a todo lo español y en la prostitución de la historia que se ha dado en bastantes aulas catalanas. Es un converso que quiere ser más independentista que los más viejos separatistas del lugar. Porque él es un “charnego” de origen. Palabrita marginadora con la que en Cataluña, califican a los que no son catalanes de pura cepa: es decir a andaluces, extremeños, murcianos o castellanos entre otros.

Mantuvo a lo largo de su discurso un lenguaje incendiario y agresivo que destilaba un odio superlativo contra el PSOE debido a que este partido no ha hecho lo que a él le hubiera gustado que hiciera: constituir un gobierno alternativo consistente en una mezcolanza de los socialistas con Podemos y sus cuarenta “mareas”, los independentistas de ERC y de la antigua Convergencia, y el PNV. Un batiburrillo de siglas ingobernable, pero que les hubiera venido al pelo a los independentistas catalanes para conseguir sus propósitos: la secesión de Cataluña.

Terminada su provocadora intervención Rufián fue felicitado por el líder de Podemos, Pablo Iglesias, que es el introductor de los modales rufianescos en el Congreso. Aunque este último los escenifica de un modo algo más maquiavélico y sutil. Aun así a veces suelta la cal viva.

Un discurso como el de Rufián, debió de ser cortado de raíz por la Presidenta del Congreso. Pero esta mujer está “en las primeras letras” que decía mi abuela. Y es que  políticos como ella, que lo mismo valen “para un barrido que para un fregado” (también lo decía mi abuela) son un prodigio de la naturaleza y a mí me impresionan. De profesión médico, ha sido ministra de Sanidad, de Fomento y ahora preside el Congreso. Una joya.

No sabiendo distinguir entre la libertad de expresión y el respeto que todo parlamentario debe a sus rivales, y confundiendo la flexibilidad con la debilidad más absoluta, consintió al ínclito Rufián toda clase de improperios sin mover un solo músculo de su rostro impasible. Sólo le quitó la palabra cuando había agotado con creces su tiempo.

Cuando Antonio Hernando, el portavoz del PSOE, con toda la razón del mundo solicitó un tiempo de respuesta por alusiones, no le dejó expresarse y le cortó el sonido sin dejarle exponer su alegato. Una vergüenza.

Creo que estamos entrando en una dinámica muy peligrosa. Así comenzaron sucesos muy desagradables que tuvieron lugar en España hace 80 años. Partidos de izquierda radical que ponen en entredicho las instituciones o los resultados de las urnas, no son válidos para construir una democracia representativa como es la española. Partidos que buscan el frentismo y la agitación callejera en lugar de exponer razonamientos que convenzan a los electores, pueden llevarnos a episodios muy graves.

Alguien sentenció con gran clarividencia que “los pueblos que olvidan sus historia están condenados a repetirla”. No deberíamos olvidar esta gran verdad.

Aunque en el parlamento español quizá sea excesivo optar por los modales versallescos, sí que es urgente desterrar de él los modales rufianescos. La actitud que mantenga la señora presidenta, exigiendo el respeto debido a todos, puede contribuir en gran medida a tranquilizar los ánimos. Y a que no vuelva a repetirse el impresentable discurso protagonizado por Rufián.