jueves, 31 de agosto de 2023

 

DECISIONES IMPRUDENTES Y CRISIS ALIMENTARIA

Manuel Pimentel, distinguido colega de quien suscribe, ha publicado hace unos días en The Objective, un excelente artículo sobre la crisis alimentaria que se nos avecina. La gran ventaja de este autor es que conoce el sector agrario en profundidad, debido a su titulación de ingeniero agrónomo y a los puestos directivos que ha ocupado tanto en la administración como en la iniciativa privada.

 Estoy absolutamente de acuerdo con el contenido del artículo de Pimentel y en lo que sigue trataré de ahondar en las tesis contenidas en el mismo. La cuestión de fondo yo la había tratado ya en este blog, porque considero que el sector agrario es estratégico no sólo para Europa sino para nuestro país de manera especial. Y se le está despojando esta condición a pasos agigantados.

Unas políticas inexplicables e imprudentes, por no calificarlas de irresponsables, auspiciadas desde la UE y seguidas en España con la fe del converso, en especial por algunos partidos de izquierda, están llevando al sector agrario y agroalimentario a un callejón sin salida.

Políticas propiciadas por urbanitas que defienden tesis ecologistas de escaso fundamento, quienes desconocen lo que es la realidad de la agricultura y la ganadería y su relación con el medio ambiente, están infligiendo un grave daño a los sectores agrario y agroalimentario a los que se culpabiliza de un teórico deterioro medioambiental tratado con tintes catastrofistas.

Olvidan que, gracias a la actividad del sector agrario y de la industria agroalimentaria, Europa y España han tenido garantizada, hasta ahora, ya se verá en el futuro, la soberanía alimentaria y de paso los ciudadanos europeos y españoles han podido disponer de productos agrícolas y ganaderos sanitariamente seguros, controlados en sus procesos productivos y con la trazabilidad certificada. Y todo esto a precios asequibles para la mayor parte de la población. Que es el objetivo que ha de tener un estado, alimentar de manera adecuada a sus habitantes a precios asumibles.

Unos burócratas de corte urbanita, que desconocen lo que es el medio rural, apoyados por una masa de población mayoritariamente residente en las grandes urbes, aborregada y sin criterio, que cree a pies juntillas todo lo que venga de la administración sea europea o española, están haciendo creer que los habitantes del medio rural son los culpables del deterioro medioambiental que dicen que se está produciendo e incluso del cambio climático. Increíble. Se está enfrentando a lo urbano con lo rural.

Si se analiza la normativa europea, las principales disposiciones que afectan al sector agrario y agroalimentario como son la Directiva Marco del Agua (DMA), el European Green Deal (Pacto Verde Europeo) en su estrategia From Farm to Fork (de la granja a la mesa), las nuevas disposiciones de la Política Agraria Común (PAC) o la nueva y próxima Ley de Restauración de la Naturaleza, presentan una orientación totalmente ambientalista. El ecologismo subyacente en estas disposiciones pretende crear en Europa una agricultura de baja productividad agraria. Para ello incentiva la agricultura ecológica de reducida capacidad de producción y limita el uso de fitosanitarios y fertilizantes o las dimensiones de las granjas de producción intensiva, entre otras cuestiones.

Las disposiciones relativas a la utilización del agua, priorizan la consecución del buen estado de las masas de agua, sobre los usos económicos, especialmente sobre el regadío, en lugar de buscar un equilibrio entre medio ambiente y economía. En el colmo de la sinrazón propugnan la eliminación de embalses, que en países áridos como España son imprescindibles para poder atender los usos económicos con garantía suficiente. Y en los planes hidrológicos españoles los nuevos embalses están proscritos.

Medios de comunicación en proceso de degeneración ideológica como El País, no tienen empacho en titular: el 2% de los españoles gasta el 80 % del agua. Sin palabras. Todo para tratar de justificar las tropelías que se están cometiendo contra los regantes.

Las consecuencias empiezan a avizorarse en el horizonte. Subidas desorbitadas del coste de los insumos agrarios: electricidad, agua, combustibles, fertilizantes, piensos, semillas y plantones, productos sanitarios y costes laborales, ahogan a los agricultores y ganaderos. Y la cadena agroalimentaria interioriza esos costes, de modo que los precios en destino se incrementan sensiblemente. Un 10,8 % marca el último valor (julio) del incremento del coste de los productos agrarios en relación con el año anterior. Sin que esta alza suponga un alivio para la rentabilidad de las explotaciones agrarias y sí que tal vez reporte beneficios caídos del cielo para algún desaprensivo, que también los hay.

Las reducción de producciones agrarias que traerán consigo las normas dictadas por burócratas irresponsables de Europa y de España, que saben de su impunidad, pues cuando se produzcan las consecuencias de sus decisiones, nadie les exigirá responsabilidades porque probablemente  ya no estén o se diluyan entre unos y otros, va a traer consigo la pérdida de la soberanía y seguridad alimentaria en la vieja Europa, probablemente el desabastecimiento de algunos productos alimenticios y un incremento notable de los precios de los mismos. Lo que repercutirá negativamente en las capas sociales menos favorecidas a las que dicen defender.

A aquellos que dictan las normas, les importa un bledo las subidas que puedan experimentar los precios agrarios, ya que ellos con sus suculentos sueldos y canonjías posteriores pueden afrontarlos.

Estoy de acuerdo con Manuel Pimentel en que el sector agrario ha sido desprestigiado y ninguneado por la sociedad urbana que desprecia lo rural. Está perdiendo su carácter estratégico. Y las consecuencias ya las estamos padeciendo. Vendrán tiempos peores. Y entonces será el llanto y el crujir de dientes. La crisis alimentaria será la venganza bíblica del medio rural sobre el urbano que lo ha maltratado.

 

Tras el período vacacional, el Blog vuelve a la actividad. Gracias por la atención prestada al mismo.

 

lunes, 14 de agosto de 2023

 

LA SOLUCIÓN: 40 DIPUTADOS SOCIALISTAS

Los resultados de las elecciones del 23 J, han dejado un panorama desolador para España. Han generado una situación de “cuasi” bloqueo, en la cual el ganador de las elecciones Feijoo del PP (137 diputados, ha incrementado su número en 48 de ellos) no puede gobernar, ni solo, ni en coalición con los partidos que teóricamente son de derechas no nacionalistas. No llegaría a alcanzar la mayoría absoluta de 176 diputados.

El segundo clasificado Pedro Sánchez del PSOE (121 diputados, uno más que en los anteriores comicios), partido que parece creerse ganador a tenor de las jubilosas manifestaciones de algunos de sus miembros más conspicuos, tal vez lograra formar gobierno si pacta con todos los partidos a la izquierda del PP. Un batiburrillo que agrupa comunistas con sus diversas variantes agrupados en SUMAR, separatistas catalanes con antecedentes golpistas de ERC y Junts y separatistas vascos del PNV y Bildu partido este último en el que militan etarras muchos de ellos condenados por asesinatos. En resumen, una amalgama de objetivos contrapuestos, muchos de ellos anticonstitucionales, que harán una España de difícil gobernación. Un gobierno que podrá ser legítimo, pero que es éticamente impresentable, salvo que el sectarismo o el ansia de poder nuble la mente de los socialistas. Eso sí se califican todos de progresistas. ¡Qué cosas ¡

La situación que atraviesa nuestro país es de tal gravedad, a pesar de la moto averiada que pretende vendernos el gobierno, que haría necesario que los partidos llevaran a cabo una reflexión con profundidad y altura de miras sobre la misma.

Un país con una deuda galopante que ya rebasa los 1,5 billones de euros y en déficit permanente; con un número de parados que supera con creces los 3 millones ya que la cifra oficial está dopada, al escamotear los fijos discontinuos que no trabajan, pero que no se les considera desempleados; con una inflación galopante que hace que las familias hayan tenido que cambiar su modelo alimentario por la carestía de los alimentos; con problemas para muchos españoles en pagar sus plazos a la banca por los altos costes de las hipotecas al elevarse los tipos de interés y con un problema territorial al que no se busca una solución constitucional, sino que se consiente que determinadas comunidades autónomas gocen de privilegios financieros y a su vez hagan de su capa un sayo incumpliendo las normas a su antojo e incluso persiguiendo al idioma español en sus territorios. Y esto enmarcado en unas débiles tasas de crecimiento y una poco transparente y nada eficiente utilización de los fondos europeos Next Generation hasta hoy, o en consentir presiones intolerables de Marruecos sobre Ceuta y Melilla.

En fin, un país que se empobrece día tras día, exige soluciones consensuadas para intentar salir de una crisis que, aunque sea negada por los gobernantes y sus medios voceros, está ahí. Para sufrimiento de muchos españoles.

Los resultados de las elecciones muestran que el bipartidismo PSOE – PP sigue dominando el panorama político al obtener 258 diputados, el 73,71 % de los 350 que conforman el Congreso de los Diputados. Es decir, hay mayoría suficiente para que una entente de los dos partidos sirviera para constituir un gobierno de concentración o salvación nacional como se ha hecho en otros países de nuestro entorno, por ejemplo, en Alemania.

Pero Sánchez no está por la labor, ya que el sanchismo es algo totalmente distinto del PSOE constitucionalista que conocimos, y en lugar de reconocer su derrota y tratar de salvar la identidad de España pactando con el ganador para juntos sacar a la nación del trance en el que se encuentra, prefiere aliarse con un conglomerado de partidos “progresistas” a los que una ley Electoral absurda favorece, con tal de seguir en la Moncloa. Eso sí pagando un alto precio a unos y otros por su permanencia en el sillón.

Aunque parezca una utopía, podría existir una solución a la situación que vive España. La voy a exponer en la seguridad de que muchos la considerarán una quimera de difícil por no decir imposible consecución.

La solución está en el propio PSOE. De los 121 diputados que alcanzó en los recientes comicios, 67 de ellos provienen de comunidades autónomas no contaminadas por nacionalismos o separatismos. Me refiero a las comunidades autónomas de: Andalucía, Aragón, Asturias, Cantabria, Castilla y León, Castilla la Mancha, Extremadura, Madrid, y Murcia. Excluyo a algunas autonomías de influencia catalanista como País Valenciano y Baleares y otras como Canarias que no se sabe si son carne o pescado.

Sería preciso encontrar dentro de estos 67 parlamentarios socialistas, 40 al menos que estuvieran dispuestos a poner los intereses de España por delante de los de su partido y apoyar una investidura de Feijoo, para formar posteriormente un gobierno de concentración nacional con profesionales y políticos de las dos tendencias, que intentara reconducir la situación en la que se encuentra nuestro país.

Estoy seguro que muchos simpatizantes socialistas, que no son sectarios ni extremistas, preferirían esta solución, al rompecabezas que se avecina, si se confirma el frente sanchista, que conducirá a cuatro años de difícil gobernación de nuestro país, por el que habrá que pagar un alto precio.

Esos 40 parlamentarios disidentes del sanchismo junto con ex dirigentes, algún barón en activo como Page, y militantes del PSOE que no están de acuerdo con el actual estado de cosas en el partido, podrían constituir el punto de salida para la refundación de un nuevo PSOE de corte socialdemócrata, que recogiera los principios constitucionales que mantuvieron durante varias legislaturas los gobiernos socialistas anteriores a los de Rodríguez Zapatero y Pedro Sánchez.

Esta solución puede que sea una utopía, una entelequia, una ensoñación o una ilusión, pero hoy por hoy es la que se me ocurre como más razonable, para tratar de recuperar España y llevarla al sitio que se merece.

 

Dada la situación política existente y a petición de algunos lectores publico esta entrada en el centro del mes de agosto. Volveremos en septiembre. Gracias por el tiempo que dedicáis a la lectura de este Blog.