jueves, 27 de mayo de 2021

 

EL HIDROGENO VERDE: MÉTODO DE OBTENCIÓN, USOS Y SITUACIÓN EN EXTREMADURA

Una de las vías que pueden utilizarse en la descarbonización de nuestros sistemas productivos, es la utilización del hidrógeno como elemento impulsor de una parte de nuestro parque de vehículos automóviles. Su uso, cuando el hidrógeno se produzca utilizando fuentes de energía renovables, se traducirá en la reducción de las emisiones antrópicas de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera, lo que es necesario para mitigar el cambio climático y evitar en lo posible que se produzca el efecto invernadero y el consiguiente calentamiento de la misma. El uso del hidrógeno en el transporte permite no emitir cantidad alguna de CO2 a la atmósfera ya que como producto final se obtiene vapor de agua.

El método tradicional usado actualmente para la producción del hidrógeno que necesita la industria es el de reformado con vapor de agua del gas natural. Este proceso utiliza el metano (CH4), principal componente del gas natural, con vapor de agua que produce (CO2) e hidrógeno mediante una reacción química endotérmica. Ha sido el método tradicional, y el que más se ha empleado para producir el hidrógeno que la industria viene demandando. Pero tiene el inconveniente de que emite dióxido de carbono a la atmósfera por lo que no cumple las condiciones que buscamos.

Existe otro método de obtener hidrógeno. Se trata de descomponer la molécula de agua H20, mediante electrólisis de la misma, de la que obtendremos el Hidrógeno (H2) y el Oxígeno. Un proceso que no emite a la atmósfera gases de efecto invernadero. Siempre que la energía eléctrica necesaria para la hidrólisis (la descomposición de la molécula de agua) provenga de fuentes renovables. Estaríamos ante el denominado hidrógeno verde, en cuyo proceso de obtención y uso posterior no se darían emisiones de CO2 a la atmósfera. Este método de obtener hidrógeno es el que ha de utilizarse en un marco de descarbonización de la economía.

La electrólisis de 1 litro de agua produce 0,1111 Kg de hidrógeno (H2) y 0,8889 kg de Oxígeno.

Un vehículo tipo turismo necesita 29 kWh / 100 km equivalente a 0,9 kg de H2. El coste de producción de 1 kg de H2 está en el entorno de 10 €. Por lo que el coste del hidrógeno para recorrer 100 km se sitúa en unos 9 €.

La gasolina sin plomo 95, para un consumo de 7,2 l/100 km con un precio medio de 1,356 €/l alcanza los 9,76 €/100 km.

El gasóleo A para un consumo de 6,5 l/100 km y coste unitario de 1,214 €/l nos llevaría a un coste de 7,89 €/100 km.

¿Y el agua necesaria para ser sometida a electrólisis, sería un factor limitante, ahora que estamos ante el cambio climático y parece que tendremos menos recursos hídricos? Unos sencillos cálculos nos demostrarán que las necesidades de agua son de poca entidad, incluso si todos los turismos de España movidos por gasolina o gasóleo pasaran a hacerlo con hidrógeno verde, hipótesis que es prácticamente imposible que se produzca.

Un vehículo turismo movido por hidrógeno que consume 0,9 kg de H2/100 km necesita 0.9/0,1111= 8,1 l de agua a hidrolizar por 100 km.

Con datos de la DGT del año 2019, había en España 10,9 Millones de turismos que utilizan gasolina y 13,5 Millones de vehículos que usan el gasóleo como combustible.

Suponiendo que todos ellos pasaran a moverse con hidrógeno (H2) y que hicieran un recorrido medio de 15.000 km anuales, las necesidades de agua a hidrolizar para obtener el hidrógeno necesario serían las siguientes, considerando que se necesitan como establecimos anteriormente 8,1 l de agua/100 km.

24.400.000 veh. x 15.000 km x 8,1 l/100km x 10 -9 l/hm3 = 29,646 Hm3 de agua al año que no serían en ningún caso un factor limitante. Equivaldrían a las necesidades de riego de menos de 4.000 ha con una dotación de 7.500 m3/ha. O al consumo urbano de una ciudad de unos 320.000 habitantes que consumieran 250 l/hab. día

Y todo esto en la hipótesis maximalista que hemos considerado y para todo el año.

Descendiendo al caso extremeño las dudas surgen cuando uno contempla el mapa de 23.000 km de hidroductos europeos (conductos para transportar hidrógeno, algunos son adaptaciones de conductos gasistas existentes y otros de nuevo cuño) previsto para el año 2040. Extremadura se encuentra en un desierto en el que no se atisba la presencia de ningún hidroducto, salvo un ramal del Madrid – Huelva (antiguo gaseoducto) que llega a Badajoz. Una vez más como en el caso del tren se deja prácticamente fuera de juego a la región.

Ningún proyecto de las grandes empresas preparado para acogerse a los Fondos Europeos Next Generation en relación con el hidrógeno verde, se encuentra ubicado en Extremadura. Hay actuaciones previstas en País Vasco, Castilla la Mancha (Puertollano), Valencia, Aragón, Galicia, Castilla y León (La Robla) o Cataluña, promovidas por empresas muy potentes como Iberdrola, Endesa, Naturgy o Repsol entre otras. El panorama es que salvo milagro de última hora nuestra comunidad autónoma llegará una vez más tarde al reparto de los 8.900 millones que se anuncian como inversión para el hidrógeno verde hasta 2030.

Eso sí, estas mismas empresas productoras de hidrógeno verde utilizarán para obtenerlo la energía renovable producida en sus plantas fotovoltaicas extremeñas, se estima que habrá unos 20.000 MW de este tipo de energía en Extremadura en el año 2030, de modo que otras regiones se llevarán el valor añadido del proceso. Lo de siempre.

 

viernes, 21 de mayo de 2021

 

DE AQUELLOS POLVOS, ESTOS LODOS

En 1975 cuando España era la potencia administradora del Sáhara Occidental y esta área africana era una provincia española, tuvo lugar, impulsada por Marruecos, la Marcha Verde. España no repelió la marcha y se produjo la salida de los españoles deprisa y corriendo de aquel territorio, dejando que Marruecos lo invadiera y expulsara a los saharauis de sus tierras, persiguiéndoles por el desierto, causando a este pueblo una terrible mortandad y sufrimientos y transterrándolo a la hamada desértica argelina. Acogidos por Argelia en campos de refugiados cercanos a la ciudad de Tinduf, desde hace 46 años sobreviven allí unas 200.000 personas en condiciones durísimas esperando un referéndum, aprobado por resoluciones de la ONU, que nunca llega.

Los saharauis se encuentran distribuidos en el desierto en cuatro wilayas o asentamientos principales: Aaiún, Auserd, Dajla y Smara y en la capital administrativa Rabuni, constituyendo la denominada República Árabe Saharaui Democrática (RASD) reconocida ya por 80 países.

Allí las condiciones de vida son extraordinariamente difíciles debido a la dureza del clima desértico, a la aridez e improductividad de las tierras y a la carencia de medios y en ocasiones hasta de los alimentos precisos, a pesar de la ayuda que presta el ACNUR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados) y que es, a todas luces, insuficiente.

España nunca ha reconocido a la RASD ni oficialmente proporciona apoyo a los campos de refugiados. Algunas comunidades autónomas españolas y ONGs (Amigos del Pueblo Saharaui) sí que tienen programas de ayuda, para hacer un poco más fácil la vida en el desierto. Tuve oportunidad de conocer estos campos con motivo de un proyecto agrícola que desarrolló allí la Junta de Extremadura y que tuve el honor de coordinar.

Por eso conozco bien las duras condiciones de vida que se dan allí y he tratado a alguno de sus dirigentes: Bucharaya Beyoun o Abdelkader Mohamed que fueron primeros ministros durante mi estancia en los campos, personas nobles, luchadoras por la libertad de su pueblo y la recuperación de sus tierras arrebatadas por los marroquíes.

Importantes intereses de adineradas familias españolas en Marruecos, propiciaron en 1975 nuestra salida del Sáhara, con el rabo entre las piernas, a raíz de la Marcha Verde dejando la iniciativa a los alauitas y el territorio en su poder y a los saharauis habitantes de aquellas tierras tirados en el desierto en unas condiciones de vida lamentables.

Marruecos ha seguido chantajeando a España en el tema saharaui, exigiéndole poco menos que un reconocimiento de su soberanía sobre lo que fue provincia española y criticando cualquier atisbo de solidaridad con los refugiados saharauis, con la amenaza de mandar oleadas de emigrantes ilegales si no se atienden sus exigencias, cosa que ya han hecho en Ceuta, Melilla y las Canarias en diversas ocasiones.

Buscando cualquier justificación para armarla esta vez ha sido el tratamiento humanitario por enfermedad dispensado por España a Brahim Galli, alto dirigente saharaui y del Frente Polisario hospitalizado en Logroño, lo que ha desencadenado una invasión de 8.000 marroquíes que han entrado a saco en Ceuta, en un episodio que recuerda como un calco lo que fue la Marcha Verde. Más de mil menores usados como escudo protector han formado parte de la operación dirigida y auspiciada por Marruecos. Que por cierto y como casi siempre pasa ha cogido desprevenido al gobierno español y a su presidente, empeñados en resolvernos la vida para el año 2050, con lo que hay que arreglar en España en el momento presente.

Cuando escuché a Pedro Sánchez decir que lo de Ceuta era una crisis humanitaria, me quedé perplejo. Una crisis humanitaria no fue lo provocado por Marruecos en Ceuta. Sería una crisis diplomática o política, pero no humanitaria. Ha sido una agresión a la soberanía española que exige una respuesta firme. Estaba todo previsto y perfectamente organizado y la policía marroquí abriendo las puertas a una invasión que ponía en juego la vida de muchas personas. Pero el rey alauita como su padre Hassan II es experto en las lides de lanzar a su pueblo a la aventura y le importa un rábano las consecuencias de muertos que puedan producirse entre sus gentes.

Pedro Sánchez, al menos esta vez, reaccionó a tiempo y se presentó con presteza en Ceuta y Melilla para tranquilizar y dar seguridad a la población. Y supongo que para dar a entender a Marruecos que no aceptaba el chantaje. Eso sí con poca firmeza, de forma tibia y regalando al alauita 30 millones de euros para que frenase la emigración. Paradojas de la vida. Y de la debilidad de un gobierno a cuya ministra de Asuntos Exteriores parece que le viene el cargo bastante ancho y no se ha enterado todavía de lo que son los marroquíes. La ministra de Defensa sí que ha entendido lo que ha pasado.

España tiene muchos más intereses en Marruecos: empresas mixtas, capitales españoles, empresas exportadoras, pesca, que con los pobres saharauis arrumbados en el desierto. Pero un país como España no puede permitir más chantajes a su vecino del sur. Ni seguir despreciando la causa saharaui.

España tiene la libertad de atender sanitariamente a quien considere oportuno sea por razones humanitarias o de otra naturaleza. Y no a quien le guste o le deje de gustar a Marruecos. Y ha de dar cumplida respuesta a la agresión sufrida en Ceuta propiciada por un sátrapa que vive en la edad media. Si no lo hace pagará las consecuencias. Y esas son Ceuta, Melilla y Canarias. Y veremos si no se animan a por la mezquita de Córdoba. Ahora que tienen el apoyo de los yanquis, con los que nuestro gobierno mantiene débiles relaciones, otro craso error diplomático, y además están rearmando su ejército con la ayuda de los americanos.

 

 

 

viernes, 14 de mayo de 2021

 

PLASENCIA SEDE DE LAS EDADES DEL HOMBRE

Hace unos pocos días se ha producido el anuncio de que Plasencia será la sede de la muestra de arte sacro Las Edades del Hombre en el año 2022. Se trata de una gran noticia para la ciudad, para la diócesis, para las comarcas aledañas a la ciudad y para Extremadura. Los atractivos del certamen y la atracción de visitantes que se prevé pueden representar un alivio para los descalabros económicos y sociales que está produciendo esta pandemia.

En octubre de 2016 en una entrada de este blog, ya dábamos cuenta de que Plasencia había solicitado a la Fundación Edades del Hombre la posibilidad de acoger este evento en fechas futuras. Ahora parece que se materializa este deseo y se transforma en realidad para el año 2022.

La diócesis de Plasencia es muy antigua. Data de más de 800 años. Fue instituida por el papa Clemente III en el año 1189 bajo el reinado de Alfonso VIII que había fundado la ciudad en 1186 y de la que fue su rey protector.  Su primer obispo fue Don Bricio que reunía la condición de “mitad monje, mitad soldado”. Su hueste participaría en la batalla de las Navas de Tolosa en 1212 que terminó con el triunfo del rey sobre los musulmanes.

El territorio de la diócesis placentina es muy extenso, abarcando una superficie de 10.000 Km2. Ocupa parte de tres provincias españolas: dos en Extremadura, Cáceres y Badajoz y una en Castilla y León, el sur de Salamanca, perteneciendo a ella 22 pueblos castellano – leoneses. Existe un arciprestazgo de la diócesis en Béjar, la segunda ciudad más poblada de la provincia salmantina.

La muestra de arte sacro denominada las Edades del Hombre, es un magno acontecimiento que lleva más de 20 ediciones en su haber. Todas las exposiciones se han desarrollado en poblaciones ubicadas en Castilla y León en donde tiene su asiento la Fundación que la organiza y creo que se ha hecho alguna muestra en el extranjero.

Plasencia solicitó ser sede de este magnífico evento para el año 2016 sin conseguirlo y ha reiterado su deseo de poder acoger la muestra, que está fundamentado en que parte del territorio de su diócesis se ubica en la comunidad autónoma de Castilla y León.  

Plasencia tiene suficientes recintos sacros para poder ubicar este evento. Su sede catedralicia es un marco incomparable para situar esta muestra de arte religioso. Tiene amplitud y espacio suficientes en su Catedral Vieja para acoger con cumplida holgura un evento de considerables dimensiones sin necesidad de interrumpir el culto en la Catedral Nueva, aunque pueda usarse parte de ésta para la exposición.

La Seo placentina presenta unas condiciones inigualables que además están realzadas por la reciente restauración de que ha sido objeto este templo mayor de la ciudad y sede de la diócesis.

También Plasencia dispone de otras iglesias que podrían recibir en su seno alguna parte específica de la exposición. Me refiero, por ejemplo, a la iglesia de San Martín en pleno centro de la ciudad que luce un magnífico retablo de Luis Morales “El Divino”. Aunque no sé si un reciente incendio permitirá su uso. Habría que intentar conseguirlo.

Incluso existen otros templos y conventos que podrían albergar este evento. Hay donde elegir.

Para los visitantes Plasencia proporcionaría otra serie de alicientes complementarios. Su casco histórico en el interior del recinto amurallado alberga una amplia gama de iglesias, conventos, palacios, casas solariegas, edificios y museos de gran valor que merece la pena visitar.

Su historia también avala este evento. Plasencia fue la ciudad en la que se casaron Juana la Beltraneja y el rey Alfonso V de Portugal en mayo de 1475 y llegó a ser corte real de Fernando el Católico en 1515 durante un corto período de tiempo antes de su muerte.

La ciudad y su alfoz disponen de una buena oferta hotelera con instalaciones emblemáticas como el Parador Nacional siempre bien clasificado por los huéspedes que lo utilizan, además de otros hoteles, alojamientos rurales y restaurantes con buena calificación.

Y en el exterior su campiña regada por el río Jerte exhibe paisajes de llano y sierra de gran belleza para ser contemplados por los asistentes.

Como aliciente adicional desde la ciudad puede girarse visita a otros enclaves turísticos de gran valor: el valle del Jerte, la Vera, el valle del Ambroz o el parque nacional de Monfragüe, están a menos de 40 km de la urbe. Y Béjar, arciprestazgo de la diócesis con sus paisajes serranos se encuentra a 60 km de Plasencia y tal vez pudiera acoger alguna actividad del evento como enganche con Castilla y León.

Conseguido el poder ser sede de esta magna exposición de arte sacro ahora lo que procede es llevar a cabo es una buena gestión para la organización de la misma, de modo que ésta acoja obras artísticas de gran categoría, traídas de fuera y unidas al rico patrimonio de obras religiosas que existe en la ciudad y en la diócesis.

Por eso sería muy conveniente articular junto a la Fundación Las Edades del Hombre con dilatada experiencia en la organización de esta muestra, una actuación conjunta del Obispado y el Ayuntamiento de Plasencia con el apoyo incondicional de la Junta de Extremadura y la participación de la Universidad extremeña para conseguir que el evento fijado para el año 2022 acoja una muestra de gran nivel, lo que será un triunfo para la ciudad y para Extremadura.

La Perla del Valle lo merece.

viernes, 7 de mayo de 2021

 

REGADIOS: ENERGÍA CADA VEZ MÁS CARA

En el año 1998 se publicaron los primeros decretos tanto a nivel nacional como autonómico que contenían las directrices para modernizar los regadíos españoles. El objetivo era ahorrar agua pues ya se detectaba que el cambio climático, tal y como aseguraban los expertos, iba a proporcionar menos recursos hídricos disponibles.

La modernización consiste esencialmente en sustituir riegos por gravedad, grandes consumidores de recursos hídricos, por métodos de riego de alta eficiencia en el uso del agua, siendo su exponente principal el riego por goteo.

Los regantes entendieron el mensaje y se aplicaron a la modernización poniendo su parte correspondiente en la financiación, la cual se llevaría a cabo a través de los citados decretos y de las cuatro Sociedades Estatales de Infraestructuras Agrarias (SEIASAs) en la actualidad refundidas en una única sociedad.

El resultado conseguido es que ya se riegan en España por métodos de alta eficiencia unos 2 millones de hectáreas. Esto ha supuesto un ahorro de agua en torno al 16 %. Somos el segundo país por detrás de Israel que mantiene un mayor porcentaje de riegos eficientes.

Para conseguir la modernización, es preciso utilizar más energía en las instalaciones porque normalmente el agua ha de ser presurizada en mayor o menor medida y esto exige el uso de energía adicional para conseguirlo.

Hasta julio de 2008 estaban vigentes unas tarifas especiales de riego denominadas R0 y R1 que suponían costes razonables para la energía eléctrica en los regadíos. Con la justificación de que una liberalización del sector eléctrico produciría reducción en el coste de la energía, fueron eliminadas en julio de 2008. Consecuencia para los regantes: el término de potencia se encareció en hasta un ¡ 1.000 % ¡ y, sumando el término de energía, el coste para los riegos se incrementó un 120 %.

Como ven se apremia a los regantes a modernizar sus riegos para ahorrar agua, para lo que es necesaria la utilización de más energía. Una vez en marcha la modernización, a los regantes se les incrementa desmesuradamente el coste de la energía. Inconcebible.  

Los regantes a través de FENACORE (Federación Nacional de Comunidades de Regantes) propusieron diversas soluciones para tratar de reducir estos desmesurados incrementos del coste energético: desde poder contratar sin penalización dos períodos de distinta potencia según sea época de riego o no lo sea, con lo cual se ahorraba bastante en el término de potencia, a pagar por la potencia realmente consumida y no por la contratada, aumentar a julio, mes de máximo consumo de los regadíos, el período P6 el más barato del término de energía o reducir el IVA del 21 al 10 %. Ninguna petición fue atendida.

La nueva normativa reguladora de los peajes y del coste energético que entrará en vigor en junio de 2021, contenida en la Circular 3/2021, de 17 de marzo, de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, por la que se modifica la Circular 3/2020, de 15 de enero, por la que se establece la metodología para el cálculo de los peajes de transporte y distribución de electricidad, y en el Real Decreto 148/2021, de 9 de marzo, por el que se establece la metodología de cálculo de los cargos del sistema eléctrico, encarecerá todavía más el coste de la energía para los regadíos.

El nuevo cambio tarifario supondrá una subida media del 96,7 % en el precio del término de energía, aunque como cuestión positiva está que se reducirá un 16,7 % el precio del término de potencia. Como además se eliminan períodos favorables P6 para el término de energía, como es el caso del mes de agosto que en la anterior normativa sí se contemplaba, el resultado neto será una subida estimada del coste de la energía eléctrica para los regantes que diversas fuentes valoran entre el 20 % y el 50 %.

Los nuevos tramos horarios están diseñados de tal forma que hacen muy difícil que los agricultores puedan agrupar los riegos en los períodos más baratos. Así que les tocará apechugar con nuevos costes que sin duda reducirán la capacidad de pago de muchas explotaciones de riego y sacarán del mercado a un buen número de ellas.

No obstante, pueden arbitrarse algunas soluciones para reducir este impacto tan negativo y hacer más llevaderos los nuevos incrementos del coste energético.

Desde FENACORE se recomienda: adaptarse en todo lo posible a los períodos en que la energía es más barata; evitar los excesos de potencia que serán muy penalizados; adaptar bien las estaciones fotovoltaicas a las condiciones del riego y en el caso de ser posible construir balsas en cotas que dominen la zona regable para llenarlas con bombeo nocturno cuyo coste es menor. Claro que esto lleva a más inversiones todavía.

La administración debería impedir estas notables subidas de coste, teniendo en cuenta el carácter estratégico del regadío que proporciona rentas y empleo en las áreas regadas, fija la población en el territorio, asegura la alimentación de los españoles y de nuestros visitantes, proporciona materia prima a la industria agroalimentaria y es un importante foco exportador que mejora nuestra balanza comercial exterior. Y de paso es un importante sumidero de CO2 de cara al cambio climático.

Sin regadío no habrá posibilidad de una agricultura productiva y viable en España. Y si nos quedamos sin regadíos que son un sector estratégico, nuestro abastecimiento alimentario quedará a expensas del capricho de los suministros que nos realicen países terceros. Alguien por los ministerios concernidos debería reflexionar seriamente sobre esta cuestión. Y dejar de poner zancadillas a nuestros regadíos.