viernes, 30 de abril de 2021

 

FONDOS DE RECUPERACIÓN EUROPEOS ¿CÓMO, CUÁNDO?

El pomposo y extenso título que les han adjudicado, Fondos de Recuperación, Transformación y Resiliencia, parece tener relación con las elevadas cantidades que se pondrán en juego y es acorde con el desmesurado anhelo que multitud de políticos, instituciones y empresas tienen por hacerse con los sustanciosos pellizcos monetarios que puedan proporcionar.

De momento todavía no se han liberado los fondos pues exige la conformidad de los 27 estados miembros de la UE. Un tribunal alemán parece que había presentado alguna objeción que ya ha sido superada. Y ahora se habla de que los fondos llegarán en verano, en el mes de julio.

Hoy, por cierto, se publica en el BOE el acuerdo del Consejo de Ministros aprobando el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia que será enviado a Bruselas. Contiene 10 políticas palanca y 30 líneas de acción.

Pero entretanto ha comenzado en España una alocada carrera para hacerse con la mayor parte posible de los 140.000 Millones de euros de los Fondos Generation Next - UE que Europa nos va a conceder, esperemos que cuanto antes, con el fin de intentar recuperarnos de los efectos de esta cruel y dañina pandemia y cambiar nuestro modelo productivo. De esa cifra algo más de la mitad unos 72.000 M€ serán subvenciones a fondo perdido y el resto habrá que devolverlo en cómodos plazos. Si el PIB español se encuentra en el entorno de los 1,2 miles de millones de euros, los fondos representan algo menos del 12 % del PIB. Además, como es lógico, siendo una considerable cantidad se distribuirá a lo largo de varios ejercicios presupuestarios. Veremos si somos capaces de gastarla en su totalidad. Y sobre todo de gastarla bien y equitativamente repartida entre los territorios

No obstante, como el pastel es suculento, llevamos ya un tiempo en el que políticos de toda clase y condición, empresarios del IBEX 35 y de los otros, consultoras, instituciones diversas, intermediarios, muñidores, conseguidores y lobistas de todo tipo y procedencia se han puesto de los nervios y desarrollan una desaforada actividad para llevarse el gato al agua y pillar el máximo que puedan de estos fondos. Se sacan todo tipo de proyectos de los cajones donde yacían por falta de financiación y aparecen profetas del nuevo modelo económico hasta debajo de las piedras.

Los medios de comunicación se hacen eco de la movida existente y algunas instituciones de la sociedad civil opinan y dan cuenta de las acciones que podrían acometerse con dichos fondos.

De las clásicas inversiones en infraestructuras y construcción que era donde se empleaban mayoritariamente las inversiones públicas antaño, hogaño sólo se habla de cambio climático, economía verde y circular, descarbonización de la sociedad, digitalización, sostenibilidad e inversiones resilientes que vaya usted a saber en qué consisten. Con la boca chica se habla de sanidad cuando debería ser lo prioritario. Por si viene otra pandemia cuando salgamos de esta.

Luego está por determinar quién va a repartir los dichosos fondos y si va a existir algún tipo de control por parte de la UE de las inversiones a las que se destinarán. La distribución del pastel parece que va a correr a cargo de Sánchez & Redondo Asociados, a los que sin duda se unirán Iglesias y Podemos que son el perejil de todas las salsas y que también querrá meter baza y llevarse parte para sí y para sus socios.

Por algunas comunidades autónomas a sus gobernantes empieza a correrles un escalofrío por la columna vertebral, por el temor de que su parte del pastel vaya a ser bastante reducida pues los votos son los votos y hay que pagar favores a aquellos que te mantienen en la poltrona.

La mayor parte de la tarta la van a degustar los de siempre, es decir, los separatistas catalanes y los no menos separatistas vascos, que van a pasar factura de sus favores y ayudas al gobierno. También sacarán tajada por sus apoyos ya se verá en qué medida: algunas mareas o como se llamen, Revilla que enciende velas a Dios y al diablo, los nuevos canarios y el artista de Teruel que algo pillará. En las comunidades gobernadas por el PSOE habrá de todo como en la viña del Señor.

Entre estas últimas se encuentra Extremadura. Se hacen listados y más listados de proyectos y actuaciones que nos van a sacar del pozo en el que estamos, como si estas inversiones fuesen el bálsamo de Fierabrás que curará todos nuestros males económicos.  Veremos cómo nos tratan esta vez. Pero me temo que, dada nuestra poca capacidad reivindicativa y la resignación innata del pueblo extremeño, nos darán unas migajas que, vendidas adecuadamente en el panorama regional, permitirán que sigamos en la penuria económica de la que disfrutamos.

No veo el tren digno, tren de altas prestaciones o como quieran llamarlo para no pronunciar la palabra AVE entre Madrid y Badajoz, antes de 2030. Es posible que lleven a cabo algunos arreglos entre Mérida y Brazatortas en la línea de Ciudad Real que seguirá con sus limitaciones. Y la vía férrea Ruta de la Plata, camino más corto entre Extremadura y Europa ni está ni se la espera. Gravísimo error. La autovía Cáceres – Badajoz y la segunda fase del hospital de Cáceres o el de Don Benito -             Villanueva, ya veremos para cuando.

Parece ser que continuaremos siendo una economía extractiva: agroalimentación, litio, energías renovables y que del valor añadido de nuestros productos se aprovecharán otros.  

Ojalá me equivoque y al final nos den a los extremeños un trato justo y diferenciado que nos sirva para empezar a abandonar la penosa situación económica en la que estamos. Pero no lo tengo nada claro. Hay muchos intereses encontrados. Y el pez grande casi siempre suele comerse al chico.

 

 

 

viernes, 23 de abril de 2021

 

ELECCIONES CATALANAS: LOS NÚMEROS CANTAN

En España somos muy dados a hacer lecturas rápidas y sacar conclusiones apresuradas de los resultados de las elecciones, sin pararnos a analizar con detenimiento los números que sustentan aquellos. Y a veces un análisis sosegado e imparcial de las cifras da pistas importantes sobre los reales resultados de las mismas.

Los últimos comicios habidos en Cataluña son un ejemplo de lo que es sacar conclusiones apresuradas, e interesadas por otro lado, de las cifras. Lo han hecho los independentistas catalanes que han lanzado las campanas al vuelo, sin mucha base que digamos.

El partido ganador de las elecciones catalanas del 14 F ha sido la abstención (2.494.382 electores, 46,46 % del total del censo). La participación ha sido muy reducida: 53,54 %. Un poco más de la mitad de la nómina de electores.

Esta elevada abstención era previsible que se produjera ya que estos sufragios no deberían haberse celebrado dada la pandemia existente y el miedo de muchos electores a salir de casa a emitir su voto por miedo al contagio. Y en el contexto de un estado de alarma como el que hay decretado en España actualmente. Pero como al final se celebraron, sigamos con los números.

El número de electores que se han abstenido es 3,82 veces superior al número de votos obtenido por el partido más votado PSC (652.858, el 23,04 % del total de votantes)

Nada más finalizar el escrutinio, las fuerzas independentistas puras lanzan las campanas al vuelo y argumentan que Cataluña es independentista.  Se olvidan del escaso 53,54 % de participación. Si sumamos los votos de ERC, JxCAT y la CUP tenemos 1.360.696 votos. Es decir, de 5.368.992 censo de votantes, sólo es independentista declarado el 25,34 %, o sea la cuarta parte del mismo. Parecen pocos votos para declarar la independencia. Ya que un 75 % del censo de votantes no se ha proclamado independentista. Tiene poca sustancia que solamente el 25 % de los votantes haya proclamado su afiliación a la independencia. Suponemos que el 75 % restante del censo de votantes, también tendrá algo que decir sobre el particular. Si lo referimos al total de población de Cataluña (7.780.479 habitantes) el número de independentistas declarados en las urnas representa el 17,48 %. Escaso bagaje.

Pero en todo caso la independencia de Cataluña ha de ser, si llegara el caso, sometida a referéndum, pero en toda España. Eso es lo que establece la Constitución vigente, mientras no se cambie.

Pero, es más, ese magro 25 % del censo de votantes se ha obtenido después de que los independentistas hayan manejado a su antojo los medios de comunicación públicos (TV3, RAC1) y bastantes privados que sobreviven de los óbolos de la Generalitat. No parece que hayan obtenido un notable éxito. Ni han movilizado suficientemente a la gente y no han obtenido más votos que en 2017. Los han perdido. Entonces obtuvieron 2.079.340 votos: han perdido 718.644. Casi nada. Conclusión: en 2021 hay menos independentistas puros que en 2017. Un 34,6 % menos.

Ahora vamos con los partidarios de un posible referéndum de autodeterminación. Advertimos desde ya que el tal referéndum es anticonstitucional y sólo en el resto del mundo es aplicable a estados que salen de procesos colonizadores. Que no es el caso. Pero hagamos números: Como partidarios de este referéndum sumaremos los votos independentistas puros, más los de En Comú Podem y la mitad de los obtenidos por el PSC partido donde la ambigüedad es su componente principal y por eso le adjudicamos la mitad pues depende de cómo baile el tal Iceta (ahora Illa que parece que es más serio)

La suma hace un total de 1.881.751 votos o lo que es lo mismo el 35 % del censo de votantes. Parece muy osado exigir un referéndum de autodeterminación sólo con el 35 % del censo total de votantes. La abstención es la que manda. No les interesa darse cuenta de esto.

Si hacemos esta cuenta para las elecciones del 2017 comprobaremos que el total de votos alcanzados fue de 2.709.030. En 2021 han conseguido 827.279 votos menos.

Así que a partir de ahora volveremos a la cantinela de España nos roba; al victimismo estrujando a Madrid para seguir chupando del bote; a la lengua catalana sojuzgando al idioma español al que no dejarán levantar cabeza; al adoctrinamiento en las escuelas y en los medios de comunicación afines; a las “esteladas”; al supremacismo catalán; a los cortes de carreteras y de las calles de Barcelona y otras capitales catalanas con cualquier pretexto; a la presión contra el que se sienta catalán y español; a la división de la sociedad catalana y a su enfrentamiento y a la manipulación de la historia, en lugar de solucionar los problemas económicos y sociales que afectan a Cataluña.

Una vez calentado suficientemente el ambiente y como tienen mayoría parlamentaria (obtenida con poco más del 50 % de participación) intentarán una nueva declaración de independencia. Han dicho por activa y por pasiva que lo volverán a hacer. Y retornarán a hacer el ridículo más espantoso como ocurriera en 2017. Y lo peor es que desde Madrid lo consentirán sin tomar las medidas legales para impedirlo. Porque en Madrid necesitan del voto independentista para seguir en la poltrona. Supongo que a última hora tendrán que aplicar la ley. No les quedará otro remedio. España es una democracia y la ley debe imperar sobre cualquier tipo de interés particular o de grupo.

viernes, 16 de abril de 2021

 

PRESIONES MINISTERIALES CONTRA EL REGADÍO

El regadío ocupa una superficie de alrededor de 3,7 Millones de hectáreas en nuestro país. Es un aprovechamiento fundamental en nuestra agricultura ya que las características climáticas de la mayor parte de España hacen necesario el riego para poder producir cultivos en el período que va de mayo a octubre. Los cultivos bajo abrigo también necesitan del riego.

Es el uso económico que más agua utiliza. Alrededor del 70 % del agua que anualmente se consume en España se destina al riego.

El regadío genera el 64 % de la producción de la rama agrícola española, una hectárea de riego produce 6 veces lo que una de secano; transforma los paisajes áridos del estío español en zonas verdes de vida vegetal; genera importantes niveles de rentas y empleo directo e inducido en las áreas regadas; fija la población en el territorio; asegura nuestro abastecimiento alimentario incluido el de los turistas que nos visitan; es el principal proveedor de productos para la industria agroalimentaria y se ha convertido en uno de los principales sectores exportadores contribuyendo a mejorar nuestra balanza comercial exterior.

En lo que concierne al cambio climático las superficies de riego constituyen importantes sumideros de CO2 por el efecto de la fotosíntesis de los cultivos.

Por todas estas razones el regadío ha de ser considerado como un sector estratégico de nuestra economía y en consecuencia defendido y promocionado por la sociedad y, por supuesto, por la administración.

Debido a los procesos de modernización acometidos por los regantes desde 1998, hoy día se riegan en España unos 2 millones de hectáreas mediante sistemas de riego de alta eficiencia (goteo principalmente). Somos el segundo país del mundo detrás de Israel que más porcentaje de su superficie riega por métodos eficientes. Este proceso modernizador ha supuesto un ahorro de agua del orden del 15 %.

El regadío ha tenido la mala suerte de que mientras el sector como tal está adscrito al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, un ministerio en declive, el agua elemento fundamental para el regadío depende del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, un ministerio en auge siendo su titular vicepresidenta cuarta del gobierno de la nación.

El Ministerio de Transición Ecológica en materia de agua se rige y sigue a rajatabla, menos en los casos excepcionales previstos en el artículo 9, la Directiva Marco del Agua, una disposición de la UE promulgada en el año 2000, en la que los objetivos ambientales de conseguir el buen estado de las masas de agua, son prioritarios frente a los usos económicos de la misma, entre ellos el regadío, cuando debería existir igualdad entre esos objetivos de acuerdo con lo dispone el Texto Refundido de la Ley de Aguas.

Esta preeminencia de los objetivos ambientales se refleja en los Esquemas de Temas Importantes recientemente aprobados como paso previo a la revisión de los planes hidrológicos del tercer ciclo de planificación, en los que la consecución del buen estado de las masas de agua es objetivo primordial. Para conseguirlo se establecen unos caudales ecológicos como restricción previa a los sistemas de explotación, sin tener en cuenta las características hidrológicas de los ríos en clima mediterráneo, ni los usos prexistentes antes de la promulgación de la Directiva Marco, entre otros alrededor de 3 millones de hectáreas de riego.

El ecologismo ha colonizado el ministerio del que depende el agua y se están produciendo una serie de hechos preocupantes que afectan al regadío. Veamos dos ejemplos.

Al parecer el Ministerio tiene el objetivo de modificar la composición del Consejo Nacional del Agua, dándole una vertiente todavía más ecologista de la que ya tiene. Al parecer pretende adjudicarse un puesto vitalicio al presidente de la Fundación Nueva Cultura del Agua de corte claramente ecologista. No se conocen las razones de esta distinción. Deducimos que la maniobra obedece a criterios ideológicos, partidistas y sectarios o tal vez al pago de servicios prestados. En la composición actual del consejo ya existen tres expertos en planificación hidrológica: medio ambiente, conservación de la naturaleza y regadíos que parece serán eliminados en beneficio de una Fundación privada que no representa a nadie más que a sí misma.

Otro ataque más al regadío nace del proyecto de decreto que regula la protección de las aguas contra la contaminación difusa. Se centra en la contaminación por nitratos de origen agrario, sin considerar que existen otras fuentes de contaminación como la multitud de núcleos de población que no depuran sus aguas, aquellos núcleos que teniendo instalaciones de depuración estas no funcionan adecuadamente y vertidos industriales sin depurar entre otros focos contaminantes no agrarios. Pues bien, a pesar del esfuerzo realizado por los regantes en modernización, aplicando técnicas de fertirrigación y tipos de abono en los que se ha reducido al máximo su capacidad de lixiviación hacía los acuíferos subterráneos, resulta que el regadío parece ser el culpable único de la contaminación difusa.

Y todo esto sin disponer de redes de medida diferenciadas con el suficiente número de puntos de control, situados en las zonas de posible contaminación, que permitan discernir quien es el que realmente contamina.

De todos estos acontecimientos y de la orientación de los planes hidrológicos, deduzco el mal porvenir que le espera al regadío con este Ministerio de Transición Ecológica. Esperemos que el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación se erija de una vez por todas en defensor del regadío como sector estratégico de nuestra economía, mostrando anta la sociedad los notables esfuerzos que está llevando a cabo para ser sostenible y respetuoso con el medio ambiente.

 

 

 

 

viernes, 9 de abril de 2021

 

REPARTO FONDOS COVID: SEGUNDO PALO A EXTREMADURA

La Orden HAC/283/2021, de 25 de marzo, regula los aspectos necesarios para la distribución definitiva, entre las Comunidades Autónomas y Ciudades de Ceuta y Melilla, de los recursos de la Línea COVID de ayudas directas a autónomos y empresas prevista en el Título I del Real Decreto-ley 5/2021, de 12 de marzo, de medidas extraordinarias de apoyo a la solvencia empresarial en respuesta a la pandemia de la COVID-19.

Se reparte un fondo de 7.000 Millones de Euros de los cuáles 2.000 Millones de Euros van destinados exclusivamente a Baleares y Canarias y los restantes 5.000 Millones van a parar al resto de comunidades autónomas y a las ciudades de Ceuta y Melilla.

El primer reparto de 10.000 M€ del fondo REACT - EU ya supuso para Extremadura (187 M€) la primera decepción. Con una población del 2,24 % del total, sólo recibió el 1,9 % de esos fondos.

En la nueva Orden de reparto de los fondos COVID, los criterios de distribución parece que han sido los mismos que los que rigieron el de los fondos REACT - EU: disminución experimentada en el PIB con 2/3 de peso, desempleo total 2/9 y desempleo juvenil 1/9. En consecuencia, el desempleo representaría pues 1/3 del peso

¿De verdad que Extremadura, última región en PIB y con cifras desesperantes en desempleo y paro juvenil, está en tan buena posición como para resultar perjudicada en la distribución de estos fondos como se verá a continuación? ¿Una región con el más bajo PIB per cápita de España, a la cabeza en desempleo total y en paro juvenil, puede resultar perjudicada en estos repartos?

Con este segundo reparto ya se han distribuido 17.000 Millones de euros y Extremadura, sigue sin recibir lo que teóricamente le debería corresponder dada su precaria situación económica y social. Estos índices que se aplican no dejan de ser favorecedores de las regiones ricas. El Covid 19 es lógico que produzca una mayor disminución porcentual del PIB en regiones ricas que en las pobres como Extremadura. Con la distribución de fondos prevista la brecha sigue y seguirá en aumento.

De este nuevo reparto de fondos COVID 19, las comunidades autónomas más beneficiadas son Baleares y Canarias con una gran diferencia pues se reparten 2.000 Millones de euros entre las dos. Canarias percibe 525,86 €/hab y Baleares 730,43 €/hab. La media de España de todas las comunidades autónomas incluidas las islas, es de 147,52 €/hab. Este desequilibrio no tiene explicación lógica por mucho que los PIB isleños dependan en gran parte del turismo.

El reparto de 5.000 Millones de euros restantes, entre las comunidades autónomas excluidas las islas, arroja un saldo medio de 113,37 €/hab. Extremadura recibirá 106,3 Millones de Euros, lo que supone 99,95 € /hab, es decir 13,42 €/hab menos que la media. Sólo 5 autonomías perciben menos cantidad por habitante que Extremadura: Galicia (86,8 €/ha), Murcia (94,3 €/hab), Cantabria (94,97 €/hab), Castilla y León (97,1 €/hab) y País Vasco (98,17 €/hab) que goza de notables privilegios fiscales. Extremadura es la sexta región que menos ayuda “per cápita” recibe. Por su precaria situación habría de ser la que más fondos “per cápita” recibiera.

Los agraciados en el sorteo son los de siempre. Se pone en cabeza Andalucía (131,04 €/hab), que es la excepción que confirma la regla. Le sigue pisándole los talones aquella región a la que España le roba y le hace de todo, es decir Cataluña (128.85 €/hab). Esta última comunidad autónoma siempre sale beneficiada, gobierne quien gobierne, ya que utiliza su chantaje permanente y sus amenazas de independencia para amedrentar al gobierno de turno y obtener cuantiosos beneficios. Así llevan siglos.

Detrás se sitúa Comunidad Valenciana (127,94 €/hab) y ya más lejos Aragón y Asturias.

Sorprende el maltrato recibido por la comunidad de Madrid a la que se asignan 100,19 €/hab, lo que representa 28,66 €/hab menos que lo que percibirá Cataluña. Es decir, por haber hecho las cosas bien y reducir menos el porcentaje de PIB que Cataluña, se castiga a los madrileños. Increíble.

Me sorprende la pasividad de la Junta de Extremadura. Sus dirigentes aceptan sin rechistar los criterios que impone Madrid, recogen las migajas que nos dan y permanecen callados como muertos. No he visto ni una sola reivindicación pública de la injusticia de estos dos repartos.

Con esta posición de resignación y asentimiento a todo lo que el gobierno central propone, es lógico que Extremadura salga perjudicada. Nadie protesta. Cuando por su situación económica y social Extremadura habría de tener un tratamiento preferencial, no sólo no se le da ventaja alguna en el reparto, sino que se relega a la región al grupo que menos ayudas per cápita percibe.

Así que el panorama que se avecina en el reparto de los Fondos de Recuperación, Transformación y Resiliencia, Fondos Next Generation es para echarse a temblar. Como siempre nos dejarán a la cola, la brecha con las otras regiones se abrirá cada vez más y así será imposible que Extremadura salga del furgón de cola de España. Lugar en el que me da la impresión de que vamos a permanecer muchos años. Veremos si quedan algunos extremeños para contarlo.

 

 

viernes, 2 de abril de 2021

 

¿PODRÁ EVITAR EXTREMADURA UNA TERCERA COLONIZACIÓN ENERGÉTICA?

El Club Senior de Extremadura, acaba de publicar un libro en el que denuncia la pasividad de la administración autonómica para evitar que la fiebre de plantas fotovoltaicas que se están instalando en la región, pueda llegar a convertirse en una tercera colonización energética de Extremadura, tras las ya sufridas con la energía hidroeléctrica y la nuclear, sin que los beneficios de la nueva producción energética verde redunden en el desarrollo extremeño.

Si no se toman medidas urgentes obligando a las grandes compañías eléctricas a que parte de la energía producida se utilice para proyectos ubicados en Extremadura, nos convertiremos una vez más en una región suministradora de materias primas, para que otras regiones se beneficien del valor añadido que comporta el desarrollo industrial. Y de este modo la región continuará en el furgón de cola de los indicadores macroeconómicos de PIB y renta y perdiendo población.

De los 21.030 GWh de energía producidos en Extremadura la región solamente consume 4.959 GWh. El 76,5 % de la energía producida en Extremadura es exportada a otras regiones,

La Administración, especialmente la autonómica, ha de tomar un papel de mayor firmeza para que estos recursos energéticos producidos en Extremadura, se utilicen en mayor medida para el desarrollo regional, evitando la tercera colonización energética. El camino que llevamos es que va a sembrarse de paneles solares nuestra región sin que la energía producida contribuya al desarrollo extremeño.

Nos ocuparán una superficie media de 2,3 ha/MW, creando algo de empleo en la fase de construcción, aunque el número de puestos de trabajo que generan estos parques fotovoltaicos en la fase de explotación es muy bajo 0,05 Unidades de Trabajo/ha.

Extremadura necesita para participar en el desarrollo que generará la transición energética:

  • ·   Establecimiento de un régimen especial de tarifas energéticas, dada la proximidad de los centros de consumo a las estaciones fotovoltaicas, reduciendo las pérdidas por transporte.
  • ·   Polígonos industriales situados en las proximidades de las grandes estaciones fotovoltaicas o establecer las plantas fotovoltaicas en las proximidades de los centros industriales, pudiendo adoptar la forma de autoconsumo.
  • ·        Establecer un plan estratégico para el uso de renovables en los regadíos que se vieron afectados por desmesurados aumentos en el coste energético a consecuencia de la desaparición de las tarifas especiales de riego en 2008.
  • ·        Utilizar los Fondos de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la UE en la región para la instalación de fábricas de componentes de baterías o de producción de hidrógeno verde.
  • ·        Favorecer el autoconsumo.
  • ·       Establecer precios diferenciales de la energía en Extremadura para incentivar la venida de industrias y ayudar a las industrias existentes. Un estudio de la UEX dirigido por el catedrático Fernando López llega a conclusiones de ahorro en el 35 % en los hogares y del 50 % en las industrias y regadíos.

Las mayores plantas fotovoltaicas de España se encuentran situadas en Extremadura. Destacan Talayuela y Talaván con 300 MW, Usagre – Hinojosa del Valle con 500 MW y Francisco Pizarro (Torrecillas de la Tiesa  - Aldeacentera) con 590 MW. Esto no significa nada más que seremos suministradores de energía si no se obliga a las empresas titulares de estas plantas a utilizar parte de la nueva energía producida en proyectos industriales radicados en Extremadura.

Las grandes compañías eléctricas están campando a sus anchas por la región, sin que la administración les obligue a que parte de la energía producida se utilice en mejorar el desarrollo regional.

Se calcula que en 2030 habrá instalados 20.000 MW fotovoltaicos en Extremadura lo que supone la ocupación de 46.000 ha de territorio regional.

La Agencia Extremeña de la Energía podría convertirse en el órgano gestor de todas las operaciones tendentes a que no se produzca la tercera colonización energética de Extremadura.

Un aspecto muy favorable ha sido la ubicación en Cáceres del Centro Nacional de Investigación en Acumulación Energética (CNIAE), el cual debe ser potenciado y convertido en un referente nacional e internacional de la investigación en acumulación energética.

Con el litio nos ocurrirá otro tanto, si no se toman las medidas correspondientes. Nos convertiremos en suministradores de la materia prima, recibiremos las correspondientes migajas, pero soportaremos los riesgos e inconvenientes de la industria extractiva y finalmente el valor añadido se lo llevarán los de siempre.

 En fechas recientes se han dado a conocer algunas iniciativas esperanzadoras en marcha para el aprovechamiento del litio, con la ubicación de fábricas de componentes de baterías en ambas provincias extremeñas. Esto abre una ventana de optimismo, a que por una vez Extremadura pueda resultar beneficiada e iniciar un proceso industrial relativo a la energía que nos permita retener aquí el valor añadido o al menos parte del mismo. Esperemos que se consoliden estas iniciativas.