viernes, 24 de septiembre de 2021

 

LOS CAUDALES ECOLÓGICOS: UN DESPROPÓSITO DE LOS PLANES HIDROLÓGICOS

La Directiva 2000/60/CE del Parlamento Europeo y del Consejo de 23 de octubre de 2000 por la que se establece un marco comunitario de actuación en el ámbito de la política de aguas, conocida como Directiva Marco del Agua (DMA), es una disposición de corte fundamentalmente ambientalista. Su objetivo casi obsesivo es el de conseguir el buen estado ecológico, químico y cuantitativo de las masas de agua: superficiales, subterráneas, de transición o costeras, subordinando a este objetivo todos los demás, empezando por la satisfacción de las demandas de los diferentes usos socioeconómicos. Esta filosofía ambientalista tiene su reflejo en el contenido de los planes hidrológicos que han de aplicarse a las demarcaciones hidrográficas europeas y que se regulan en esta norma.

En mi opinión, uno de los vicios ocultos de esta directiva es el de que no tiene en cuenta las diferencias climáticas existentes en la UE y especialmente las que hacen referencia a los climas mediterráneos del sur, que presentan notables divergencias sobre los que existen en Centroeuropa.

En la susodicha directiva no se mencionan para nada los caudales ecológicos en el apartado de definiciones, como sí se hace con otros conceptos. Los caudales ecológicos son introducidos en la normativa española de aguas, incluso con anterioridad a la promulgación de la Directiva Marco, en base al contenido de los documentos previos que dieron lugar a ésta.

En España, presionados por lobbies ecologistas que incluso participan como expertos en la redacción de determinados estudios, y que también aprietan en Bruselas, sin encomendarnos a Dios ni al diablo y demostrando que somos más papistas que el papa, cometimos un disparate jurídico como fue el de otorgarles a los caudales ecológicos el carácter de restricción previa a los sistemas de explotación de las diferentes demarcaciones hidrográficas, aplicándolos con carácter retroactivo sin valorar el grado en el que afectarían negativamente a usos preexistentes y especialmente a las garantías de los regadíos españoles.

La situación actual es: primero se atienden los caudales ecológicos y con lo que queda atendemos las demandas de los usos económicos (sólo se exceptúan los abastecimientos urbanos cuando no existan recursos alternativos). Es decir, se priorizan objetivos ambientales sobre los socioeconómicos, cuando deberían tener el mismo grado de jerarquía pues la normativa de aguas en relación con la planificación hidrológica no marca prioridades entre ellos.

Desde otra perspectiva la introducción de estos caudales ecológicos, es un error técnico ya que no se adecúan al régimen natural de la mayor parte de nuestros ríos. Los ríos mediterráneos, casi todos los ríos españoles, en régimen natural en el estiaje sus caudales tienden a cero.

Para asegurar los caudales ecológicos se utilizan los embalses de regulación que se construyeron para avalar las garantías de los diferentes usos (abastecimiento, regadíos o usos industriales). Con esta manera de proceder y si no se hacen nuevas obras de regulación, que por cierto no se prevén en los planes hidrológicos nuevos como sería lógico contemplar, el mantenimiento de estos caudales ecológicos se hace a costa de reducir la garantía de las demandas de los usos socioeconómicos.

Tampoco existen estudios contrastados para la determinación del valor de estos caudales ecológicos. Se aplican unas veces modelos hidrológicos y en otras ocasiones modelos hidrobiológicos, que dan resultados muy dispares. Hasta el punto de que existen estudios de la cátedra de Hidráulica de la Escuela de Ingenieros de Caminos de Madrid que cuestionan los valores de esos caudales que la Confederación Hidrográfica del Tajo aplica en los documentos del tercer ciclo de planificación ahora en redacción, en el tramo del río Tajo entre Bolarque y Aranjuez en donde se aumentan de 6 m3/s a 8,3 m3/s sin aparente necesidad.

Por todo lo anterior, sería imprescindible revisar en profundidad la aplicación de estos caudales ecológicos que, tal y como están diseñados ahora, afectan negativamente a usos preexistentes anteriores a la inclusión de aquellos en la normativa de aguas. Usos que tendrán que ser indemnizados si se producen perjuicios a los mismos y se judicializan los casos.

Esta revisión pasaría por no considerar a los caudales ecológicos como una restricción previa a los sistemas de explotación y ponerlos en pie de igualdad con la satisfacción de las demandas para poder llegar a una concertación entre ellos. En segundo lugar, poner en marcha estudios y modelos para poder establecer sistemas contrastados y homologados para determinar sus valores en relación con el buen estado de las masas de agua. En tercer lugar, diseñar las nuevas obras de regulación necesarias para poder atender estos nuevos caudales ecológicos, de modo que su participación en los sistemas de explotación no afecte negativamente a usos preexistentes o futuros.

Pero me temo que no van a ir por ahí los tiros. Los ecologistas - que en algún foro han propuesto el disparate de reducir en un 25 % la superficie del regadío español - pesan mucho en el Ministerio de Transición Ecológica y los regantes, los principales perjudicados, poco. Pero no se debiera olvidar que el regadío es un sector estratégico en la economía española y básico para asegurar nuestra alimentación. Y depender de terceros países para el abastecimiento alimentario es una política de alto riesgo y un gravísimo error, aunque lo defiendan los ecologistas. En este tema debería opinar el Ministerio de Agricultura del que dependen los regadíos y la alimentación. Pero, de momento, este departamento se dedica a aplicar paños calientes.

 

  

viernes, 17 de septiembre de 2021

 

ANDALUCÍA FUTURA POTENCIA ECONÓMICA

Andalucía ocupa una superficie de 87.599 km2 y está poblada por más de 8,5 millones de habitantes. Su territorio se ubica al sur de la península Ibérica dando cara al mar Mediterráneo y al océano Atlántico y más allá al norte de África un continente inexplorado todavía.

Andalucía posee un notable potencial de recursos naturales, que bien explotados e industrializados, harán de esta región una de las más potentes de España, estando ya camino de conseguir este objetivo.

La naturaleza la ha dotado de un mar que le proporciona importantes recursos pesqueros destacando entre otros productos: sardinas y boquerones de Málaga, gambas blancas de Huelva, langostinos de Sanlúcar, atún de las almadrabas gaditanas y una serie de especies como la lubina, la dorada, la corvina, el pargo, la urta, el cazón, o los salmonetes que se comercializan en importantes lonjas como las de Cádiz o Isla Cristina.

Tiene una notable diversidad climática. Encontramos climas subtropicales costeros que permiten el cultivo de especies que son sensibles a los fríos continentales como el aguacate, el mango, la chirimoya, y los “berries” de Huelva (fresas, frambuesas, arándanos) así como de frutales cítricos (naranja, mandarina o pomelo) o de hueso (ciruela, melocotón o nectarina). Y en materia de horticultura, Almería con sus invernaderos se ha convertido en la huerta de Europa.

Su clima interior un poco más continental hace de Andalucía el reino del olivar en el que se producen aceites de oliva de altísima calidad y es el origen de variedades como la Picual o la Hojiblanca y también aceituna de mesa en la que destacan la variedades Manzanilla o Gordal. Excelentes vinos muy afamados como los de Jerez que ocupan las albarizas gaditanas de esta área, vinos cordobeses de Montilla y Moriles o del Condado en Huelva se producen en esta región sureña.

Otros cultivos más extensivos como el maíz, arroz, cereales de invierno, girasol, algodón ocupan suelos muy fértiles que abundan en la región como son los vertisoles andaluces, las conocidas como “tierras de bujeo” que presentan altos contenidos en arcillas expansivas (esmectita y montmorillonita) y tienen altísima fertilidad dada la elevada capacidad de intercambio catiónico de las mismas.

Su potencial de regadío comprende más de 1,1 millones de hectáreas que representan el 30 % del regadío español. Es la región con más superficie de riego de España. El 80 % de la misma se riega por métodos de alta eficiencia.

Sus dehesas de encinas y alcornoques la ocupan cerdos de raza ibérica que, alimentados con sus montaneras, producen afamados jamones y otros derivados, amparados en la denominación de origen Jamón de Huelva, con Jabugo en primera línea. De cerdo blanco en la Alpujarra hay también excelentes productos como el jamón de Trévelez. Y también tiene su asiento en la dehesa andaluza el ganado vacuno de raza retinta, oriundo de Andalucía y muy adaptado al clima. El retinto se cruza industrialmente con otras razas como la charolesa o limusina. Las ganaderías de lidia son otro tesoro de Andalucía, que ocupa parte de este hábitat.

Todos los productos agrícolas y ganaderos son trasformados por medio de una industria agroalimentaria muy potente.

Andalucía, además, tiene un potencial turístico de primer nivel. Turismo de sol y playa en sus costas del Sol o de la Luz, pero también turismo de interior en ciudades tan emblemáticas por su monumentalidad como Sevilla, Granada, Málaga y Córdoba. Pero hay otras ciudades intermedias muy interesantes declaradas patrimonio de la Humanidad como Úbeda y Baeza. Las civilizaciones fenicia, romana, visigoda y musulmana dejaron la impronta de su paso por la región.

Superficies protegidas como el Parque de Aracena y Picos de Aroche, el de Cazorla, Segura y las Villas, la Sierra Norte de Sevilla, Los Alcornocales o el del Cabo de Gata son un atractivo más para los visitantes. Al igual que zonas de turismo rural como la Axarquía, las Alpujarras o los pueblos blancos de Cádiz.

El clima es tan diverso que permite la existencia de nieves perpetúas en Sierra Nevada lo que da lugar a la ubicación allí de una importante estación invernal a la que acuden infinidad de practicantes de los deportes blancos.

Su infraestructura de comunicaciones es muy destacada. Puertos como los de Algeciras de gran actividad en el trasiego de mercancías, o Málaga este último con una importante actividad de turismo de cruceros, destacan en el tema marítimo. Tiene aeropuertos en Almería, Córdoba, Granada, Jerez, Sevilla y Málaga este último el cuarto con más tráfico de pasajeros de España.

En ferrocarriles el AVE llega ya a las principales ciudades y está en marcha la puesta en servicio de aquellas que faltan. Y se construye el corredor mediterráneo decisivo para el transporte de mercancías hacia Europa.

La red de autovías, pendiente de completar en algún caso y de mejorar en otros como la A – 92 va a completar una red de comunicaciones muy importante para la comunidad autónoma.

Las nuevas tecnologías están teniendo una importante representación en Universidades como Málaga o Sevilla, donde existen destacados parques tecnológicos, lo que facilitará la industrialización digital de la región.

Junto a industrias clásicas como la minería o químicas en Huelva, están presentes en Andalucía industrias aeronáuticas como Airbus, que junto a la industria naval van adquiriendo cada vez más importancia. Las factorías automovilísticas también tienen instalaciones en Andalucía y podrán fabricarse allí los nuevos modelos eléctricos o de hidrógeno que sustituirán paulatinamente a los clásicos. Sus altas horas de insolación o de viento terrestre y marino permitirán la instalación masiva de energías renovables.

La región tiene buenas perspectivas de crecimiento y entre 2020 y 2021 su población residente se incrementó en 23.366 habitantes, cuando muchas comunidades autónomas españolas perdían población.

Creo que Andalucía puede ser una potencia económica en el futuro de España. Y pasará de una región que perdió población en la industrialización del siglo XX a ser receptora de habitantes en la industria de las nuevas tecnologías. Creo que están trabajando bien para conseguirlo. Desde mi casa de Islantilla en Huelva, puedo apreciarlo. Creo que acerté adquiriendo mi segunda vivienda en Andalucía. El clima y sus gentes rozan la excelencia. Y por eso me gusta Andalucía. Tal vez los extremeños deberíamos mirarnos en este espejo.

viernes, 10 de septiembre de 2021

 

EL LUCRO ABUSIVO DE IBERDROLA EN VALDECAÑAS

Iberdrola explota para aprovechamiento hidroeléctrico los embalses de Valdecañas, Torrejón – Tajo, Torrejón - Tiétar, Alcántara (José María de Oriol) y Cedillo situados en cascada en el curso principal del río Tajo. Este conjunto de embalses fue construido por Hidroeléctrica Española hoy integrada en Iberdrola a mediados del siglo XX.  

El aprovechamiento de 1 m3 de agua turbinado en cascada desde Valdecañas a Cedillo produce 0,8 kWh de energía hidroeléctrica.

Las empresas hidroeléctricas obtienen sustanciosos beneficios con el sistema actual de precios, pues no facturan en función de su coste de producción, sino del precio marginal al que venden los más caros del mix eléctrico español (las centrales de gas). Este precio de mercado percibido está muy por encima del coste de producción hidroeléctrico, por lo cual Iberdrola ha aprovechado para llevar a cabo una turbinación de agua abusiva de modo que estando el embalse de Valdecañas a 1 de marzo de 2021 con un volumen almacenado 1.258,64 Hm3, en fecha 9 de agosto de 2021 sólo embalsaba 305,76 Hm3. Su capacidad de almacenamiento es de 1.446 Hm3.

La bajada de cota en el embalse a consecuencia de esta turbinación excesiva e incontrolada, ha afectado, dejándolas inoperativas, entre otras a las tomas de abastecimiento urbano del núcleo de Berrocalejo y a la de 1.434 ha de riego de la zona regable de Peraleda de la Mata declarada de interés nacional por Decreto de 17/10/1968 publicado en el BOE de 29/10/1968.

Para esta última zona la Junta de Extremadura y la Comunidad de Regantes de Peraleda han tenido que acometer obras de emergencia para poder regar y acceder a la cota de agua por debajo de la situación normal de sus tomas. Si una zona regable es declarada de interés nacional y se aprueba su proyecto con una cota determinada de toma, es de suponer que otros usos que ocupan un orden de preferencia por detrás del regadío, no pueden interferir en éste. Y mucho menos condicionar el abastecimiento de poblaciones. Berrocalejo ha tenido que usar pozos o sondeos antiguos para evitar el desabastecimiento.

Por mucho que la concesión administrativa de la que dispone, autorice a Iberdrola a desembalsar entre las cotas 315 y 290, el organismo de cuenca, que en este caso es la Confederación Hidrográfica del Tajo, no puede consentir que este desembalse desmesurado pueda afectar a usos preferentes como son el abastecimiento urbano y el regadío.

Y para realizar este control están la guardería fluvial y la Comisaría de Aguas de esta Confederación de la que dependen las concesiones de agua en el dominio público hidráulico. En este caso parece que han mirado para otro lado. Es la táctica aplicada en muchos casos por la administración española del agua que ha conducido a la estimación de que en España existen más de 500.000 aprovechamientos ilegales, sin clausurar ni sancionar.

El lucro abusivo de Iberdrola nace del hecho de que mientras el coste de su producción hidroeléctrica está en 0,3 c€/kWh (según estudio de la UEX del catedrático Fernando López y colaboradores) el último precio medio de la energía que es el que percibe Iberdrola por su producción hidroeléctrica era de 115,8 €/MWh = 11,58 c€/kWh (12 de agosto de 2021)

Estimamos un precio medio percibido por Iberdrola en el período marzo – agosto en el que se ha efectuado este escandaloso desembalse de 8 c€/kWh, y que se ha turbinado en cascada entre Valdecañas y Cedillo todo el desembalse efectuado. Con estas hipótesis, el beneficio total obtenido por Iberdrola, teniendo en cuenta que el beneficio neto es de 7,7c€ / kWh o lo que es lo mismo 0,077 €/ kWh producido, estaría en unos 58,7 Millones de euros. Les ahorro las operaciones que dan lugar a esta cifra, pero son muy fáciles de llevar a cabo con los datos anteriores. A este valor habría que sumar el producido por el volumen de agua de la aportación natural del río Tajo al embalse en ese período que también ha sido turbinado pero que no consideramos al no disponer de datos sobre el mismo.

 Aunque el importe del beneficio calculado anteriormente es una estimación y puede que la cifra no sea cien por cien exacta, no andará muy lejos de la realidad. Como puede verse es una pasta gansa, obtenida como beneficio caído del cielo, a costa de llevarse por delante las necesidades prioritarias de abastecimientos urbanos y de regadíos declarados estos últimos de interés nacional. Y también poniendo en peligro el Parque Nacional de Monfragüe como ya ha sido denunciado.

A toro pasado, la ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, anuncia a bombo y platillo una investigación contra el desembalse efectuado por Iberdrola en Valdecañas y también en Ricobayo donde la empresa hidroeléctrica ha hecho lo mismo que en el embalse extremeño. Me temo que al final todo quedará en nada o en muy poco. Al tiempo.

La única solución para que no vuelva a producirse en el futuro esta situación reside en limitar, mediante la aplicación de lo que se conoce como “curva de hierro”, la capacidad de Iberdrola de turbinar cuando el nivel de embalse llegue a la cota de toma de los aprovechamientos de los abastecimientos y regadíos de Peraleda. Podía aprovecharse el plan hidrológico de la cuenca del Tajo actualmente en revisión para hacerlo, modificando las características de la concesión.

Dudo mucho de que lo hagan. Entretanto en dicho plan hidrológico se continuarán reduciendo dotaciones para los regadíos y autorizando el trasvase de agua desde el Tajo al Segura cuando en la cuenca cedente existen al menos cinco sistemas de explotación deficitarios. Y el Plan Hidrológico Nacional sólo autoriza el trasvase de aguas excedentarias.

Pero es lo que hay. Iberdrola da la impresión de que es quien realmente manda en el Tajo. La Confederación consiente y mira para otro lado. Y el Ministerio rubrica el despropósito, llevando a cabo una investigación a toro pasado, en lugar de impedir el abuso cuando se estaba produciendo.

 

viernes, 3 de septiembre de 2021

 

SECTARISMO, IGNORANCIA Y CACIQUISMO

La alcaldesa de Gijón ha impartido una lección de sectarismo y uso de métodos dictatoriales al decidir unilateralmente que a partir de ahora en su ciudad no habrá más corridas de toros. Porque a ella le viene en gana, y porque ella lo vale. Y sanseacabó que toman a misa. Una cacicada en toda regla.  

Como argumento para tomar tan drástica decisión ha utilizado uno que además de ser inadecuado, revela una gran ignorancia de esta primera edil gijonesa en lo referente a lo que es y significa la tauromaquia. Esta abarca no sólo la corrida de toros, sino todo el proceso de cría y manejo del toro de lidia en el campo. Esta edil ha demostrado no tener ni repajolera idea de la cuestión.

La peregrina razón a la que se agarra para suspender en el futuro las corridas de toros en su ciudad, es la de que en un festejo celebrado hace unos días en la plaza de El Bibio de Gijón dos de los toros lidiados llevaban como nombres Feminista y Nigeriano.

Parece que dado el grado de acentuado sectarismo en el que se encuentra inmersa esta alcaldesa, estos nombres deben tener para ella (cree el ladrón que todos son de su condición) connotaciones machistas o racistas. Parece que considera que el ganadero al dar nombre a sus toros, ha pretendido insultar a las feministas, en todo caso sería con retraso porque el nombre se le dio al astado hace 4 años al menos, y también denigrar a los negros nigerianos, aunque no se especifique la raza, porque en Nigeria también hay blancos.

El desconocimiento que esta señora tiene sobre el mecanismo habitual que se aplica hace muchos años en las dehesas y ganaderías de bravo de España, para dar apelativo a los toros de lidia es mayúsculo. En su imprudencia ni siquiera ha tenido la humildad de asesorarse antes de utilizar esta justificación de los nombres de los toros, tan pedestre, falta de contenido y además mendaz, para tomar la drástica decisión de inhabilitar en el futuro el coso gijonés para albergar festejos taurinos.

Debería saber que en contra de su indocta opinión los toros reciben el nombre de sus vacas madre, adaptado a su sexo. Esto se hace en las ganaderías de bravo desde tiempos inmemoriales y el nombre no tiene ninguna finalidad de cara a defender una idea o de insultar o denigrar a alguna persona, grupo o etnia. Sólo en una mente tan retorcida como la de esta alcaldesa puede caber la atribución de intencionalidad alguna en el nombre que se impone a los toros bravos.

La alcaldesa antes de proseguir con su actuación caciquil y supresora de los festejos de toros en Gijón, debiera darse una vuelta por alguna de las ganaderías que pastan por nuestra piel de toro, para que le expliquen cómo se nominan las vacas y los toros de lidia. Y de paso comprobar el exquisito trato que reciben estos animales en las dehesas de España. Y además que los técnicos y veterinarios, le pongan al día sobre la genética de esta raza de toros en donde anida la bravura y la nobleza que es lo que permite que la fiesta nacional tenga lugar. Sólo esta raza es capaz de soportar el castigo que recibe sin rehuirlo. Por algo será.

Puede ser comprensible que a la primera edil gijonesa no le atraigan los toros. A mucha gente no le gusta este espectáculo. Pero a muchos otros gijoneses y asturianos, por reducirlo al marco regional, estoy seguro que sí les atraen las corridas y acuden a los festejos de la plaza gijonesa. Y habrá otro grupo de ciudadanos que, sin gustarles los toros, no quieren impedir que otras personas asistan a este espectáculo. La edil debería considerar que los toros son un bien cultural protegido por la ley y no puede prohibirlos, ni denigrarlos, salvo que se modifique la norma. Debería conocer estos extremos porque la joven ocupó la Consejería de Cultura del Principado de Asturias.

Por otra parte, la alcaldesa no representa a todos los gijoneses porque no la han votado todos en masa a ella y debe respetar que un número más o menos elevado de aquellos gocen de la tauromaquia que es un espectáculo legal. La alcaldesa, aunque parece que le gustaría, no puede imponer el pensamiento único, que es el suyo, en Gijón. A estos socialistas sanchistas de nuevo cuño, abrazados al comunismo, les gusta mucho que todos pensemos como ellos.

Hay otra razón de peso más. La plaza de El Bibio se construyó con el fin exclusivo de que hubiera corridas de toros. Fue la causa primigenia de que se levantara este coso. Habrá que analizar la procedencia de los fondos que se emplearon para construirlo, si eran exclusivamente fondos municipales o hubo otro tipo de aportaciones privadas o de asociaciones taurinas, si los terrenos en los que se levantó eran de propiedad municipal o fueron objeto de expropiación. Sería muy interesante que la alcaldesa desvelara estos pormenores que son de gran importancia.

Lo que sí puede la alcaldesa es anular las subvenciones de dinero público municipal para las corridas si el Ayuntamiento mediante la oportuna votación así lo decide. Pero no puede prohibirlas. Los toros son un bien cultural protegido por la ley.

También en el supuesto que la plaza fuera de propiedad municipal de forma indubitable, tal vez procedería que esta alcaldesa convocase un referéndum o consulta con los ciudadanos al objeto de dilucidar quienes están de acuerdo con su iniciativa de que no vuelva a haber toros en esta plaza gijonesa. Claro que habría de ser un referéndum imparcial sin interferencias sesgadas del Ayuntamiento.

Pero con los modos dictatoriales y caciquiles que exhibe esta primera edil, no parece que eso sea posible.

Terminado el período vacacional, volvemos a las andadas. Reitero mi agradecimiento a los lectores del blog por el tiempo que dedican al mismo.