jueves, 9 de julio de 2015

 ¿QUO VADIS, GRECIA?

Grecia es un país soberano y democrático. Por estas razones tanto sus ciudadanos como su gobierno merecen todos los respetos en las decisiones y estrategias que puedan adoptar para defender sus intereses.  

Independientemente de los errores que hayan podido cometer sus gobernantes, los anteriores falsificando las cuentas nacionales hasta que fueron descubiertos por la “troika” y los actuales porque prometieron el oro y el moro, a sabiendas de que no podrían cumplir sus promesas por falta de financiación, las verdaderas víctimas de la situación son, como siempre suele ocurrir, las capas más desfavorecidas de la población y la clase media griegas.

Las grandes fortunas helenas tienen sus tesoros a buen recaudo en paraísos fiscales o en otros países de la UE, a salvo de cualquier riesgo. Es decir la misma canción de siempre.

Por eso los ciudadanos griegos que están padeciendo las consecuencias de esta profunda y duradera crisis merecen no solo nuestro respeto sino también la ayuda solidaria del resto de países de la UE, para que puedan salir de esta coyuntura que está causando tremendos sufrimientos a los más inocentes, en una tierra en la que surgió la democracia y en donde vieron la luz muchos personajes preclaros que pusieron las bases de la civilización moderna: Solón, Sócrates, Platón, o Aristóteles nacieron en la Antigua Grecia.

Las finanzas griegas se encuentran en bancarrota, nadie presta a esa nación, que ha generado una deuda del 180 % de su PIB y se ve en la coyuntura de no atender ni a los pagos de los intereses. Está subsistiendo gracias a los fondos que el BCE proporciona a su banca que está en la agonía. La última decisión económica es un “corralito” en el que los depositantes de la banca sólo pueden extraer 60 € diarios.

Entretanto una gran parte del capital depositado en los bancos ha huido al extranjero.

La UE es un club que tiene unas reglas de juego que imponen los países poderosos como Alemania, que son los mayores prestamistas y que con su tradicional cartesianismo exigen a los griegos la adopción de más reformas sobre las ya sufridas para intentar que Grecia crezca y con ello garantizarse las devoluciones de la deuda.

Para ello Alemania a través de la “troika” ha impuesto y sigue en la línea de continuar con más y más recortes a los griegos, lo que se traducirá en más sufrimiento para los pensionistas, los funcionarios y en general para las capas más desfavorecidas de la población. No quieren darse cuenta de que estas políticas de exclusiva austeridad aplicadas hasta ahora no han logrado resolver el problema.

El reciente y apresurado referéndum, con un fondo demagógico auspiciado por Tsipras, el trasunto griego de nuestro Pablo Iglesias ¡oído al parche¡ puede que haya sido un éxito político para el líder de Syriza, pero no ha supuesto una ventaja en la posición negociadora de los griegos. Estamos en las mismas que el día antes del plebiscito.

Lo lógico sería negociar con Grecia una salida mixta en la que se le exigiera a los helenos las mismas condiciones medias que al resto de países de la UE: edad de jubilación, número de funcionarios en relación a la población, unas fuerzas armadas racionalmente dimensionadas y en paralelo buscar una salida a su economía mediante inversión generadora de empleo en los sectores más atractivos como pueden ser el turismo o la industria agroalimentaria, a la par que se reestructura la deuda aumentando los plazos de devolución y reduciendo al máximo los intereses, utilizando al BCE como mecanismo intermedio.

En resumen el asunto es muy complejo de difícil solución y que exigirá un largo tiempo para su arreglo. El peor escenario sería la salida de Grecia del Euro, el denominado Grexit, pues en última instancia sería la ruptura de la UE y el fallido de los préstamos concedidos a esa nación, con las consecuencias negativas no sólo para Grecia, se verían de inmediato afectadas sus relaciones comerciales con el resto de la UE, sino también para los países y entidades prestamistas.

Creo que el Grexit aunque no pueda ser descartado parece difícil que llegue a producirse. La posición geoestratégica griega y su pertenencia a la OTAN hará que Obama tome cartas en el asunto ante la UE para que se garantice la permanencia de los griegos en la organización europea de una u otra manera. Así que habrá que seguir negociando.

1 comentario:

  1. El refranero popular es muy sabio: " Entre todos la mataron, y ella sola se murió".
    Angel Sánchez

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